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Así es Bernard Arnault, el hombre que ha desbancado a Elon Musk como el más rico del mundo
Las cuentas de la revista Forbes sitúan al dueño del conglomerado de lujo LVMH por encima del magnate dueño de Tesla y Twitter
Los coches eléctricos de Tesla situaron a Elon Musk en el top de los hombres más ricos del mundo. Sin embargo, tras una aventura espacial, la compra de la red social Twitter y la reducción del valor de las acciones de Tesla a la mitad le ha dejado este año en un nada desdeñable segundo puesto.
Por encima, tan solo está Bernard Arnault, presidente y director ejecutivo del conglomerado LVMH, un holding de artículos de lujo del que controla el 50 % y que tiene bajo su propiedad hasta 76 marcas de renombre como Louis Vuitton, Givenchy, Moët Chandon, Sephora o TAG Heuer.
Arnault tuvo un comienzo profesional inusual para un director ejecutivo en la industria de la moda: comenzó como ingeniero y promotor inmobiliario en la empresa de ingeniería civil de su familia en el norte de Francia. Para 1984, tenía ambiciones mucho más allá de la construcción y comenzó a realizar una serie de movimientos audaces para hacerse cargo de una empresa que podía escalar a nivel mundial.
El secreto de su éxito: Christian Dior
Compró Boussac, un famoso (pero en bancarrota) conglomerado francés, para poder hacerse cargo de uno de los negocios bajo su paraguas: La Casa Dior, que había codiciado durante años, desde que de pequeño su madre le había contado su fascinación por la casa francesa. Dior se convirtió en la piedra angular de su grupo de lujo y, después de vender la mayoría de los demás activos, reinvirtió el efectivo en sus próximos objetivos de lujo: Moët Hennessy y Louis Vuitton, dos icónicas empresas francesas que se fusionaron con LVMH en 1987.
Una vez en la puerta de LVMH usó la disputa constante entre los dos directores ejecutivos para asegurar una participación mayoritaria y luego expulsó a los dos directores ejecutivos en guerra. Después de ganar «una de las batallas más feroces de la moda francesa», se convirtió en presidente, director ejecutivo y accionista mayoritario de LVMH, cargo que continúa ocupando desde abril de 2022. Con las marcas de LVMH y docenas de empresas adquiridas creó el conglomerado de lujo más poderoso del mundo, con ingresos de 44.600 millones de euros (51.000 millones de dólares) para 2020.
Vendedor del lujo mundial
La adquisición de Tiffany & Co por 15,8 mil millones y del grupo hotelero Belmond por 3.200 millones de dólares marcaron la diferencia. En Francia ya dicen aquello de «todos los caminos conducen a Arnault» y no es de extrañar ya que es la referencia en la venta de champán, vino, licores, moda, artículos de cuero, relojes, joyas, hoteles, perfumes y cosméticos.
Conocida es la frase sobre el valor y la importancia de sus empresas utilizando un ejemplo básico: «¿Puedes decir que dentro de 20 años la gente seguirá usando el iPhone? Tal vez no. Tal vez tendríamos un nuevo producto o algo más innovador. Lo que puedo decir hoy es que, dentro de 20 años, estoy bastante convencido de que la gente seguirá bebiendo Dom Pérignon». Esta mentalidad empresarial le lleva a poseer alrededor de 186.200 millones de dólares en efectivo y otros activos, y eso que el debilitamiento de los mercados le ha quitado 7 millones en el último año.
Cinco hijos bajo el cobijo LVMH
En cuanto a su vida sentimental, Arnault se casó en 1973 con su primera mujer, Anne Dewavrin, con quien tuvo dos hijos, Delphine y Antoine. Su matrimonio solo duró 17 años y 12 meses después volvió a contraer matrimonio con la concertista de piano canadiense Hélène Mercier-Arnault. Juntos han tenido 3 hijos: Alexandre, Frédéric y Jean. Da la casualidad que los cinco han terminado trabajando en empresas de LVMH junto a su padre.
La primogénita Delphine es subdirectora general de Louis Vuitton. Le sigue Antoine, que ostenta el cargo de director general de Berluti y presidente de Loro Piana y que está casado con la top model rusa Natalia Vodianova. Por su parte, Alexandre y Frédéric son directores ejecutivos de Tiffany y Tag Heuer, mientras Jean se encarga del marketing y desarrollo de la relojería de Louis Vuitton.