El primer plan de la Princesa Leonor con sus compañeros fuera de la Academia Militar de Zaragoza

Tras años protegida bajo el ala de sus padres, especialmente de la Reina Letizia, de quien ha trascendido en muchas ocasiones su empeño por salvaguardar la privacidad de sus hijas todo lo que sea posible, el ingreso de la Princesa de Asturias en la Academia General Militar de Zaragoza parece confirmarse como un punto de inflexión que va más allá del día a día de la Princesa Leonor y que podría aplicarse también a su imagen pública.

Así se confirma con la noticia de la primera salida de la dama cadete Borbón Ortiz, publicada por El Heraldo de Aragón. Tal y como recoge el citado periódico, el pasado domingo la hermana de la Infanta Sofía fue vista, junto a un grupo de alrededor de 25 compañeros de la Academia, en El Tuno, un conocidísimo bar de Zaragoza. Eran alrededor de las ocho de la tarde cuando los jóvenes entraron al emblemático local y fue precisamente la hija mayor de los Reyes de España quien se acercó a la barra a pedir para todos.

Pizzas, hamburguesas y huevos rotos para compartir y refrescos de cola y agua para beber. Un plan de aproximadamente una hora que terminó con los estudiantes marchándose en varios taxis para llegar a tiempo a la Academia, donde debían presentarse antes de las 21:30h. La cuenta, de 170€, se dividió a escote entre todos, por lo que pagaron cerca de 7 euros por cabeza por la cena.

Un plan en el que la Princesa Leonor contaba con compañía extra, ya que junto a ella acudieron dos escoltas que, tal y como ha revelado el dueño del bar, se sentaron de manera discreta en otra mesa para no importunar a la joven.

Isidro Francés Ruiz, propietario de El Tuno, ha explicado también que Doña Leonor vestía pantalón negro, camisa rosa y gafas de sol, y que parecía ser una más del grupo, estando sentada en el centro de todos ellos y mostrándose desenvuelta con sus compañeros. Para el hostelero, la presencia de la Princesa de Asturias en su bar es motivo de orgullo y agradecimiento y asegura que, si bien es cierto que el sitio es uno de los habituales de los cadetes de la AGM, Isidro considera que, el hecho de que la promoción de la Princesa también haya acudido allí, da categoría a su negocio.

A no ser que la Academia imponga actividades o maniobras a sus estudiantes, habitualmente los cadetes cuentan con los fines de semana libres. 48 horas en las que, visto lo visto en sus primeros días de su formación militar, podría ser habitual ir conociendo algo más de la vida personal de la futura Reina de España, que vive, ahora en Zaragoza, su tercer año consecutivo fuera de casa.