El motivo por el que Manuel Campo Vidal y María Rey se separan tras 25 años juntos y tres hijos

La historia de amor de Manuel Campo Vidal y María Rey ha llegado a su fin, pero entre ellos sigue existiendo una relación estupenda porque están mirando por el bienestar de sus hijos: Iria, Iago y Nacho. Los tres son muy jóvenes, pero tienen a sus espaldas unas brillantes trayectorias que demuestran que son perseverantes a la par que talentosos.

Antes de entrar en detalles hay que dejar claro que Campo Vidal y María Rey no se han separado por ningún motivo extraño, simplemente su matrimonio se ha desgastado. Han estado casados 25 años y ambos creen que lo mejor emprender aventuras personales distintas.

Fuentes cercanas aseguran que los periodistas siguen compartiendo tiempo juntos, de hecho es habitual verles en la casa familiar. Hace un tiempo, María Rey dio una entrevista en ¡HOLA! y reconoció que tenía cierto miedo de quedarse sola en su domicilio. Sus hijos se van haciendo mayores y en algún momento tendrá que enfrentarse a esta etapa, de hecho la mayor ya vive fuera.

«Le tengo pánico al nido vacío. No quiero ni imaginarlo. Toda mi vida he estado rodeada. Los hijos de Manuel se vinieron con nosotros siendo muy niños, así que he vivido con cinco hasta que los mayores se independizaron», comentó haciendo alusión a los hijos que Campo Vidal tiene de una relación anterior. «Luego quedaron tres, ahora quedan dos y en algún momento, no muy lejano, no quedará ninguno. No sé cómo lo voy a llevar, tendré que hacer algún tipo de curso para madres abandonadas».

La impecable trayectoria de sus hijos

Campo Vidal y María se conocieron en Antena 3, cuando él era directivo de la cadena y ella corresponsal. Llevan la comunicación en la sangre, pero sus hijos han optado por caminos diferentes. Iria ha hecho su vida en Bruselas. Dejó su residencia familiar para centrarse en sus estudios y la experiencia le gustó tanto que le pidió permiso a su madre para no volver en una temporada. Poco a poco, ha ido creciendo como profesional, probando suerte en diferentes sectores y emprendiendo proyectos variados.

Iria estudió Filosofía, Política y Economía en la Universidad de Utrecht, situada en los Países Bajos, pero le apasiona la moda y creó una empresa digital destinada a vender productos sostenibles. Su hermano Iago le puede ayudar, pues se ha formado en Administración y Dirección de Empresas (ADE) y tiene un máster en Data Science.

El hijo mediano de Campo Vidal y María Rey ejerce su profesión en la compañía Celver, pero también ha creado sus propios proyectos, de hecho le han entregado un galardón por su espíritu emprendedor: el Premio en Emprendimiento Satelital en Innovations Days. «Estando en Bachillerato, creé una empresa con un amigo, Microscuantis. Compramos microcoches, los que se conducen sin carnet desde los quince años y los arreglamos, tuneamos y revendemos», explicó en el medio citado anteriormente. Según contó, su padre le animó desde el primer momento a fundar su propia empresa.

Nacho, el benjamín de la familia, pensó que había heredado la pasión de sus padres por el periodismo, pero después de dio cuenta de que lo suyo era el mundo empresarial y artístico. «Cuando era pequeño, pensaba que me dedicaría al periodismo deportivo, pero con el tiempo me atrajo más la dirección de empresas». Esa es la razón por la que imitó el camino de su hermano Iago y se matriculó en ADE. No obstante su verdadera afición es la música, de hecho ha trabajado de DJ en discotecas importantes e incluso ha pinchado en Italia y México.