Urdangarin y Ainhoa Armentia, fotografiados en bañador en Formentera

Lejos han quedado aquellos días en los que Urdangarin lloraba en su coche, mientras Ainhoa Armentia intentaba consolarlo. Ahora, la pareja ha dejado atrás ese capítulo y disfruta al máximo del otoño en Formentera. Iñaki y Ainhoa han pasado unos días en la isla, en lo que ha sido una escapada romántica que les habrá venido de maravilla tras los meses complicados que han vivido. Este año no ha sido precisamente sencillo para el exduque de Palma. En enero, por fin nos enteramos de que él y la infanta Cristina habían firmado su divorcio, dos años después de que salieran a la luz aquellas fotos en las que paseaba por la playa de la mano de Ainhoa. Decidieron finalizar su matrimonio en Barcelona, de manera discreta, con un divorcio notarial, la vía más rápida para poner fin a sus 26 años de unión. Desde entonces, la vida de ambos ha dado un giro importante, aunque Iñaki sigue siendo foco de atención mediática, a pesar de que intenta mantenerse al margen.

La última prueba de ello ha sido su escapada romántica, que ha salido a la luz gracias a la revista Diez Minutos, que ha compartido imágenes exclusivas de su estancia. La pareja llegó a Formentera el viernes 27 de septiembre, una fecha perfecta para disfrutar de la isla sin las aglomeraciones del verano y con buen clima. Según relatan, el sábado amaneció nublado, por lo que Iñaki y Ainhoa decidieron hace una excursión en moto, un medio de transporte muy habitual en la zona. Después de este cambio de planes, optaron por almorzar una paella en un restaurante típico de la zona y, más tarde, se relajaron en la playa. El domingo, el destino fue la famosa playa de Ses Illetes, un lugar espectacular con aguas cristalinas, arena fina y unas vistas inigualables. Aunque es una de las playas más concurridas de la isla, eso no impidió que la pareja disfrutara al máximo de su tiempo juntos.

Se les ha visto más relajados que nunca, y no contentos con disfrutar del sol y la arena, decidieron hacer una recreación de una de las escenas más icónicas del cine romántico: el famoso levantamiento de la película Dirty Dancing. Las fotos capturan el momento en el que Iñaki, tumbado boca arriba en la arena, levanta a su novia con toda su fuerza y concentración, mientras ella, extiende los brazos. Eso sí, entre tanta coreografía, también se ve un gesto algo más pícaro: Ainhoa no pudo resistir la tentación de tocarle el trasero al ex de la infanta Cristina. Vamos, que más que en la playa, parecían dos adolescentes en pleno coqueteo veraniego.

También nos ha generado atención el nuevo estilo de Iñaki. . Desde su separación, su mirada ha dado un giro radical. En las fotos lo vemos con unas bermudas, gorra y un gorrito de pescador, el famoso bucket hat, muy casual y juvenil. Y, para completar el look, lleva un reloj deportivo y unas sandalias básicas.

La pareja también ha dejado ver sus figuras en bañador, y hay que decirlo: se mantiene en excelente forma. Iñaki luce un bañador verde flúor que resalta su silueta atlética, mientras que Ainhoa presume de un cuerpo tonificado en bikini. Además de disfrutar de las playas de Formentera, ambos son grandes aficionados a la naturaleza. No es raro verlos escaparse a los bosques de Álava para recorrer rutas de senderismo por los impresionantes paisajes de la provincia vas. El pádel y el running también forman parte de sus actividades favoritas, un gusto compartido que refuerza su rutina activa. El deporte, claramente, tiene un papel importante en sus vidas y eso se refleja en su físico envidiable.