Los Reyes, con Pedro Sánchez y Begoña Gómez, en el Palacio Real, el 12 de octubre de 2018
Día de la Hispanidad
La espantada de Begoña Gómez en el besamanos del Día de la Hispanidad
Imputada por tráfico de influencias y corrupción, la mujer de Pedro Sánchez prefirió quedarse en casa ante el chaparrón
¿Error de protocolo o afán desmedido de protagonismo? El 12 de octubre de 2018, Pedro Sánchez se estrenó en los actos del Día de la Hispanidad de un modo un tanto bochornoso. Dentro del Palacio Real, durante el tradicional besamanos, el presidente y su mujer Begoña Gómez saludaron a los Reyes y se colocaron a su lado como si ellos también presidieran el besamanos, papel que corresponde únicamente a Don Felipe y Doña Letizia. Se quedaron diez segundos esperando a la llegada de los invitados hasta que les avisaron de que tenían que retirarse.
Seis años después, a Begoña Gómez se le han quitado las ganas de figurar, vestir sus mejores galas y sobre todo, dar la cara. Imputada por tráfico de influencias y corrupción en los negocios. En la semana en que la Audiencia de Madrid ha avalado la investigación del juez Juan Carlos Peinado a Juan Carlos Barrabés, el empresario que promovió la cátedra de la esposa de Sánchez.
Los Reyes y Begoña Gómez y Pedro Sánchez, en 2019
La mujer de Pedro Sánchez ha estado presente en varios de los besamanos del Día de la Hispanidad, aunque ya en los últimos años, cuando el papel de su marido como presidente ya estaba comprometido, se quedó en casa. En 2022 ya se ausentó justificando su ausencia, debido a una gripe. Y en 2023, también causó baja. Este año 2024, no han dado ninguna explicación de su ausencia, aunque parece evidente.
En 2022 ya se ausentó justificando su ausencia, debido a una gripe. En aquel momento se comentó que su ausencia se debía a una gripe, en esta ocasión no hemos podido saber el porqué de la ausencia de Gómez.
Como era de prever, Sánchez no pudo evitar los abucheos, una vez más. Ni la lluvia ni la lejanía del público pudieron silenciar los gritos y los insultos. «¡Dimisión!», «¡ladrones!» y «PSOE, Batasuna» pudo escucharse con contundencia. Al presidente le tocó pisar la calle, después de que la UCO estrechase el cerco sobre José Luis Ábalos apuntando a su «vinculación directa» con el empresario Víctor de Aldama, quien se introdujo en el ministerio gracias a la mediación de Koldo García, para conseguir contratos públicos y beneficiarse de la red de contactos que le facilitaban.
Otras ausencias destacadas
Además de la espantada de Begoña Gómez, ha habido otras ausencias llamativas como la de la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, o la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, o la de Igualdad, Ana Redondo.
En cuanto a los presidentes autonómicos, faltaron el de Canarias, Fernando Clavijo, el lehendakari vasco Imanol Pradales o el presidente de Melilla, Juan José Imbroda. En cuanto a los regresos destacados, el del presidente de la Generalidad Salvador Illa.
