Kate Middleton envía una emotiva carta previa a la celebración de la Navidad

La Princesa de Gales ha vivido el año más sombrío de su vida. Desde que el pasado enero le diagnosticaran un cáncer, se vio obligada a dar un paso atrás y apearse de sus compromisos oficiales. Afortunadamente, ya ha concluido su tratamiento de quimioterapia preventiva. El próximo 6 de diciembre participará en el servicio religioso de villancicos en la Abadía de Westminster de Londres. Y previamente, ha enviado una carta donde asegura que el amor es «el mayor regalo que podemos recibir». En el mensaje, se dirige a los 1.600 invitados de la misa, organizada por ella misma, donde se espera que esté acompañada por su esposo, el Príncipe Guillermo. Es probable que la pareja lleve a sus tres hijos, el Príncipe Jorge, de 11 años, la Princesa Carlota, de 9 años, y el Príncipe Louis, de 6.

Según la Princesa, la Navidad es uno de sus momentos favoritos del año porque permite «salir de las presiones de la vida diaria» para «parar y reflexionar» sobre las cosas que nos unen y vivir la vida con «un corazón abierto, amor, amabilidad y perdón». «La historia de la Navidad nos anima a considerar las experiencias y los sentimientos de otros, también refleja nuestras propias vulnerabilidades; nos recuerda la importancia de dar y recibir empatía (...) y nos anima a acercarnos al amor frente al miedo», escribe.

En palabras de Catalina, el amor es «el mayor regalo que podemos recibir», no solo en Navidad, sino todos los días y «la luz que puede brillar con más fuerza incluso en nuestros momentos más oscuros».

Actuaciones musicales

La misa Juntos por Navidad contará con villancicos a cargo del coro de la Abadía de Westminster, así como actuaciones musicales de Olivia Dean, Gregory Porter o Paloma Faith y de la Real Escuela de Ballet o lecturas del Príncipe Guillermo y personalidades británicas como atletas olímpicos y paralímpicos, entre otros.

Cada invitado recibirá, además, esta carta escrita por la Princesa Catalina, en agradecimiento por todo lo que han hecho para llevar consuelo y esperanza a aquellos que más lo necesitan.

Para la misa, la Abadía de Westminster se adornará con decoraciones «festivas y sostenibles» e incluirá un «árbol de la amabilidad» en el exterior, donde los asistentes podrán dedicar una de las decoraciones a alguien que les ha ayudado a lo largo de sus vidas.