
Rafa Nadal y su restaurante Totó
El negocio fallido de Rafa Nadal en Madrid
Se trata del famoso local Totó, situado en una de las zonas más exclusivas de la capital, donde disfrutar de una comida costaba 65 euros por comensal
El restaurante Totó, ubicado en el emblemático Paseo de la Castellana de Madrid, en el número 36, ha cerrado sus puertas, sorprendiendo a muchos. Entre sus socios se encontraban grandes nombres del deporte como Rafa Nadal, Cristiano Ronaldo, los exjugadores de baloncesto Pau Gasol y Rudy Fernández, así como el piloto de motociclismo Joan Mir. Inaugurado en 2022, destacó por ofrecer una experiencia culinaria única, fusionando lo mejor de la cocina italiana tradicional con un toque mediterráneo. Sin embargo, tras tres años de funcionamiento y con el respaldo de estas destacadas figuras, el establecimiento no ha logrado mantenerse operativo. Actualmente, Google indica que está «cerrado temporalmente», aunque no se han revelado las causas exactas de su cierre, lo que deja en el aire la posibilidad de que vuelva a abrir en el futuro. Eso sí, quedan abiertos otros espacios de la misma marca en el extranjero, como Totó Dubái y Totó Abu Dhabi.
El local de la capital de España se hizo notar por la magia de su ambiente, donde la suave iluminación de las velas y la música envolvente creaban una atmósfera única. El diseño de interiores, realizado por Mabel Design y Marta Fueyo (con experiencia en Soho House), convirtió el lugar en un espacio acogedor y elegante. Con 600 metros cuadrados llenos de encanto, contaba con una barra imponente, reservados privados y un escenario para conciertos, ofreciendo una experiencia más allá de la gastronomía. Además, su colección de fotografía italiana añadía un toque artístico y sofisticado al espacio. Sin embargo, a pesar de estos lujosos detalles, la oferta y el ambiente no fueron suficientes para mantener el restaurante, que ha cerrado sus puertas.

Platos del restaurante Totó
Desde el inicio del día, el menú ofrecía opciones exquisitas, como yogur griego con granola, frutos rojos frescos y miel, o elegantes huevos al horno con espárragos y trufa negra, ideales para quienes buscaban un desayuno exclusivo. Para la comida y la cena, las opciones mantenían el nivel alto, con platos como caviar negro con blinis y crema agria, langostinos rojos italianos y hasta ostras Gillardeau. Sin embargo, la relación calidad-precio fue un punto polémico. «El lugar es bonito y el servicio excelente, pero 65 euros por persona no justifican la experiencia. La comida no cumplió las expectativas», comentó un cliente desilusionado.
Las críticas en Tripadvisor son variadas. Un comensal destacó la buena atmósfera del establecimiento, aunque mencionó que la iluminación era demasiado tenue y las mesas algo juntas, lo que restaba comodidad a la experiencia. Otros elogiaron el servicio de aparcacoches y la carta, pero algunos mencionaron la falta de variedad y criticaron el pan, diciendo que parecía poco apetecible, a pesar de un cargo adicional de tres euros por el servicio. Sin embargo, también hubo quienes quedaron encantados con la experiencia: «Cada plato fue un éxito total, definitivamente un acierto», compartió otro usuario satisfecho.