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Trishekel hispano-cartaginés

Trishekel hispano-cartaginésMAN

El Museo Arqueológico Nacional adquiere una moneda de plata acuñada por Cartago

El Museo ha adquirido por 21.000 euros en la sala Jesús Vico una moneda «Trishekel hispano-cartaginés» de plata perforada

El Museo del Romanticismo y el Museo Arqueológico Nacional (MAN) han adquirido, respectivamente, un cuadro de José Villaamil (S.XIX) y una Medalla de Oro con el busto de Fernando VII de la Constitución de Cádiz (1812) y una moneda acuñada por Cartago en la Península Ibérica en el 206 a.C.

En concreto se trata, según ha publicado hoy el BOE, del lienzo «Matrimonio de Isabel II y la infanta Luisa Fernanda con Francisco de Asís y el duque de Montpensier», obra de la Escuela Española del siglo XIX realizado por el pintor; y una medalla de oro con el busto laureado mirando a la derecha del Rey Fernando VII. El Ministerio de Cultura y Deporte ha ejercicio el derecho de tanteo cuando ambas piezas han salido a la venta subasta pública en la sala Abalarte de Madrid por un importe de 2.000 euros (en el caso del lienzo de Villaamil) y en la casa de subastas Cayón por 16.250 euros (medalla de oro).

Trishekei hispano-cartaginés

También para el Museo Arqueológico Nacional, Cultura –a propuesta de la Dirección General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes– ha adquirido por 21.000 euros en la sala Jesús Vico una moneda «Trishekel hispano-cartaginés» de plata perforada (moneda que pertenece a las emisiones acuñadas por Cartago en la Península Ibérica para afrontar los gastos de sus ejércitos de conquista entre 237 y 206 a.C.).

En 237 a. C, Cartago se encontraba empobrecida y endeudada tras su derrota contra Roma por lo que emprende la conquista de Iberia en busca de nuevos recursos, sobre todo los metales preciosos de las minas del sur. El plan de expansión combinada con su acción militar, diplomática y colonizadora acabó por provocar una segunda guerra con Roma en la denominada Segunda Guerra Púnica que acabó en derrota cartaginense.

Como es habitual, la guerra y la conquista requirió grandes cantidades de monedas, la mayoría acuñadas en la Península y que tuvieron también un fin propagandístico: en el reverso se encontraba la imagen de un elefante de guerra, que simbolizaba el poder militar cartaginés en tierra. Mientras que en el anverso estaba el dios Melqart, asimilado al Heracles griego.

A propuesta de la Dirección General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes, Cultura también ha ejercido el derecho de tanteo sobre unas cenefas decorativas para vajillas y textiles hechas en el siglo XIX por la escuela valenciana. Estas irán al Museo Nacional de Artes Decorativas tras ser compradas por 150 euros.

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