Hallan la calzada romana «más importante de la historia de Escocia»: por ella pasaron todos los reyes escoceses
Fue descubierto durante una excavación en el jardín de una casa de campo, situada a pocos kilómetros al oeste del centro de la ciudad de Stirling y junto al Puente Viejo del siglo XVIII
Tras permanecer 2.000 años en el olvido, la calzada romana «más importante de la historia de Escocia» ha sido encontrada en el jardín de una casa de campo ubicada a pocos kilómetros al oeste del centro de la ciudad de Stirling y junto al Puente Viejo Colgante del siglo XVIII. Según han detallado los expertos, el camino fue utilizado por personajes históricos clave en la historia de Escocia.
Debido a su importancia estratégica para cruzar el río Forth y llegar a las «tierras altas», así como por su proximidad a Stirling, la antigua capital de Escocia varias de las figuras relevantes de la historia del país pasaron por esta carretera para llevar a cabo diversas campañas militares.
Construida alrededor del siglo I d.C. por los ejércitos romanos del general Julio Agrícola, esta calzada empedrada vio pasar a «romanos, pictos, Guillermo el Conquistador, Oliver Cromwell y todos los reyes de Escocia, incluidos MacBeth, Kenneth McAlpin y Roberto I», detalla Murray Cook, arqueólogo del Ayuntamiento de Stirling.
«Es la carretera más importante de la historia de Escocia, así que es un descubrimiento asombroso. Caminar literalmente por donde pasaron Wallace y Bruce, por no hablar de los romanos, pictos y vikingos, es asombroso. Además, hasta este hallazgo nunca se había sabido por dónde discurría esta calzada», indica el arqueólogo.
Si continuabas hacia el sur, la carretera se dirigía a Falkirk hasta llegar a Inglaterra, mientras que al norte, «te llevaría a cruzar el Tay y los confines del Imperio romano», explica Cook.
Cook se puso en contacto con Jennifer Ure, propietaria de la casa donde antiguamente se encontraba una posada del siglo XVII para organizar una excavación en el jardín de su casa, pues tenía la sospecha de que por él pasaba esta ruta tan importante: «No tenía ni idea de que la carretera pudiera haber estado allí hasta que Murray apareció y me pidió que excavara en el jardín. Cuando se encontró la calzada, no pude evitar emocionarme, sobre todo por su importancia», comenta la propietaria de la casa.
Los expertos afirman que las legiones romanas habrían utilizado la calzada para llevar a cabo nuevas invasiones escocesas bajo los reinados de los emperadores Antonino y Severo durante los siglos II y III d.C. Por otro lado, el arqueólogo escocés afirmó que la calzada no se mantuvo tras la marcha de los romanos, «por lo que se convirtió en una hondonada erosionada y lo que hemos descubierto es la superficie erosionada de la calzada», detalla el responsable de las excavaciones en las que han participado voluntarios y estudiantes.
«Sabemos que aquí existe un vado desde 1304, cuando la zona era vigilada por los espías de Eduardo I durante el asedio al castillo de Stirling, en el que utilizó el 'Warwolf', el fundíbulo más grande del mundo», añade Cook. También explica que antes de que se construyera el vado, «es probable que se utilizara el de Cambuskenneth», que era el único lugar del Forth por el que se podía cruzar.