Donald Trump seguirá entorpeciendo la investigación del asalto al Capitolio para proteger a su aliado Steve Bannon

Donald Trump está intentando bloquear la divulgación de documentos relacionados con el ataque al Capitolio del 6 de enero al comité de la Casa Blanca encargado de investigar el accidente. Esta acción desafía la decisión inicial de Joe Biden de renunciar a sus privilegios ejecutivos, permitiendo a la justicia americana acceder a los archivos de la Casa Blanca.

El expresidente de Estados Unidos ha tramitado una demanda judicial contra el comité, alegando que la petición del equipo de investigación «carecía de límites» ya que buscaban demasiados documentos que no tenían relación con el asalto.

Tildó la investigación de «ofensiva, una expedición de pesca ilegal sin ningún tipo de propósito legislativo legítimo». Trump ya había advertido que se interpondría a la investigación, teniendo por aliado a Steve Bannon, que se ha negado a asistir al comité ya sea con documentos o para declarar. Pero el desafío legal sobrepasa las 125 páginas de registro iniciales que Biden cedió al comité.

La demanda de Trump, que se dirige tanto al comité investigador como a los archivos nacionales, busca invalidar la petición del congreso en su totalidad, describiéndola como «demasiado amplia» y un desafío a la separación de poderes. Exige a las cortes impedir al archivista sacar los documentos.

Esta queja del expresidente americano llegó a la víspera de la reunión en la que un panel judicial votaría para recomendar que Steve Bannon, antiguo estratega y asesor de Trump, sea juzgado criminalmente por su negativa a compartir con el congreso documentos y testimonios. El comité asegura que Bannon se comunicó con Trump antes del asalto al Capitolio.

Una lista de resoluciones esbozada por el mismo comité de investigación delinea todas las maneras en las que Bannon estaba involucrado en los preparativos de la insurrección, incluyendo informes que aseguran que «animó» a Trump a concentrarse el 6 de enero, junto a sus comentarios el día 5 de enero de que «se iba a armar una gorda» al día siguiente.

«El señor Bannon parece haber jugado un papel polifacético en los eventos del día 6 de enero, y el pueblo americano se merece escuchar su testimonio de primera mano», escribió el comité. Una vez voten sobre si acusar de insubordinación a Bannon, podría llegar al departamento de justicia que decidirá si presentar cargos contra él.

En una carta obtenida por Associated Press, se ve que la Casa Blanca también está intentando minar la defensa de Bannon. El diputado del consejo Jonathan Su escribió que la decisión de Trump respecto a los documentos implicaba también a Bannon, «y de momento no sabemos de ninguna razón por la cual –Bannon– no debería presentarse a declarar».

Por su parte, Steve Bannon declara que requerirá una orden judicial para acudir a su citación. El antiguo jefe de seguridad de la Casa Blanca, Mark Meadows, y un antiguo asesor del Pentágono, Kashyap Patel, están negociando con el comité el estatus de Bannon.