Boris Johnson pudo eludir el estado de alarma al celebrar fiestas en Downing Street durante la covid
Cuando Reino Unido estaba en el segundo encierro, el primer ministro permitió que se celebrara una fiesta en el número 10 de Downing Street
Boris Johnson y su personal de Downing Street (Reino Unido) han sido acusados de saltarse las normativas por covid al asistir a una fiesta que se celebró el año pasado durante el período prenavideño.
El primer ministro pronunció un discurso en una concurrida salida en busca de un asesor superior en noviembre pasado, cuando el país estaba en las garras de su segundo bloqueo.
Pocos días antes de Navidad, con Londres en restricciones de nivel 3, los miembros de su equipo celebraron una fiesta privada en el número 10 de Downing Street. La fiesta de Navidad oficial del personal se canceló y se aseguró que los funcionarios tuvieron que conformarse con una reunión por Zoom. Sin embargo, sí que se celebró una fiesta no oficial que tuvo lugar el 18 de diciembre.
«Alrededor de unas 40 o 50 personas se reunieron en una fiesta en la que estaban todos apiñados», según publica The Mirror.
La fuente de The Mirror asegura que durante el estado de alarma hubo «muchas reuniones sociales» en Downing Street. Sugieren, incluso, que «siempre había fiestas» en el piso que Johnson comparte con su mujer.
Las revelaciones se producen después de que Jenny Harries, directora ejecutiva de la Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido, anunciara que los ciudadanos deberían limitar la socialización esta Navidad para reducir los contagios por covid.
Algo en lo que le ha llevado la contraria Johnson quien rechazó este miércoles que las fiestas deban descartarse: «No queremos que la gente cancele tales eventos».
Por parte de Downing Street, no se han negado las informaciones publicadas en The Mirror, aunque aseguran que «sí se han seguido las normas contra la covid en todo momento».
En cuanto a la mujer de Boris Johson, su representante niega rotundamente que se hayan celebrado encuentros con amigos durante el estado de alarma. «Es una tontería. La señora Johnson ha seguido las reglas en todo momento y es categóricamente falso sugerir lo contrario».