Putin, ¿dueño de un misterioso yate de 700 millones de euros en Italia?

¿Quién es el dueño del Scherezade? Este yate, de 140 metros de eslora, y valorado en casi 700 millones de euros, se encuentra anclado en el puerto toscano Marina di Carrara, sometido desde hace varios meses a reparaciones en tierra. La embarcación, ahora, podría ser investigada junto a los demás bienes que pertenecen a oligarcas rusos en Europa por que se sospecha que su dueño es ni mas ni menos que a Vladimir Putin.

Un vídeo publicado por la Fundación Anti-Corrupción, dirigida por el líder de la oposición ruso Alexei Navalni, alegó tener pruebas irrefutables de que el yate (que se encuentra entre los 20 más grandes del mundo) es del líder del Kremlin. A través de una investigación, el equipo de Navalni descubrió que más de la mitad de la tripulación estaba empleada por el Servicio de Seguridad Federal ruso (FSO), que, entre otros, gestiona la seguridad privada de Putin.

¿Cómo se supo? No fue complicado. Algunos de los miembros de la tripulación figuraban como «empleado del FSO» en las listas de contactos de los teléfonos móviles investigados, entre ellos Sergei Grishin, capitán del navío. Además, una base de datos filtrada reveló que el contramaestre, Anatoli Furtel, residía en una dirección de Sochi identificada como unidad de protección del Servicio de Seguridad. En total, señaló el equipo de Navalni, 23 marineros a bordo del enigmático navío están involucrados con el FSO.

El Scherezade sumaría un lujo más a la lista del jerarca ruso, cuya fortuna es desconocida para el resto del mundo. Construido en Alemania en 2020, el yate cuenta con seis cubiertas, que incluyen una piscina con cubierta retráctil que hace las veces de pista de baile, un gimnasio, un spa, grifos bañados en oro, y un helipuerto.

La policía italiana no ha hecho todavía ninguna declaración sobre la pertenencia de la embarcación, pero, de probarse los supuestos vínculos con el patriciado ruso, sería confiscado igual que los demás yates amarrados en los puertos europeos de los multimillonarios que han hecho su fortuna a la sombra de Putin.

Italia, destino popular para los círculos más pudientes del globo, lleva meses dedicada a castigar a los millonarios rusos asociados con el Kremlin. El 4 de marzo, la policía confiscó el «Lady M», navío de casi 800 millones de euros perteneciente al magnate Alexei Mordashov, y en Sanremo, se llevaron al «Lena», el yate de Gennady Tinchenko. El premio gordo fue el «Sailing Yacht A», una embarcación de 600 millones del que es dueño el magnate del carbón Andrey Igorevich Melnichenko.