Dos bombarderos con capacidad nuclear de EE.UU. sobrevuelan el flanco este de la OTAN

Este martes dos aviones de tipo bombarderos con capacidad de transportar armas nucleares, sobrevolaron el flanco este de la OTAN, sobre espacio aéreo de Rumanía y muy cerca del Mar Negro desde donde el ejército ruso dispara sus misiles contra el territorio ucraniano.

Este vuelo responde a sutiles señales en el marco de las tensiones entre Occidente y Rusia, pero sobre todo en las intenciones de ambos bandos de evitar una 'tercera guerra mundial', mostrando la capacidad destructiva con la que cuentan cada uno para disuadir al adversario. A continuación analizaremos este discreto, pero significativo hecho.

La tarde del 24 de febrero, pocas horas después del inicio de la invasión rusa de Ucrania y ya conocidas las primeras sanciones de Occidente, Vladimir Putin ordenó activar sus planes de disuasión que incluyen el uso de armas nucleares. Esa misma noche, la OTAN, en boca del ministro de exteriores francés Jean-Yves Le Drian, le recordaba a Putin que «la Alianza Atlántica es también una alianza nuclear».

Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, precisamente por el uso funesto de dos bombas atómicas contra Japón, ninguna otra arma de este tipo ha sido usada en una de las guerras subsiguientes a pesar de la proliferación de más de 15.000 ojivas nucleares. La premisa, para evitar usarlas es la «garantía de destrucción mutua asegurada» o dicho de otra forma, una devastación nunca antes vista en la que todos perderíamos.

La insinuación de Putin, que bajo su decisión cuenta con unas 6.800 cabezas nucleares, por minutos pareció olvidar que su contraparte, la OTAN cuenta con unas 7.000 armas de este tipo entre sus aliados: Estados Unidos con 6.600, Francia con 300 y Reino Unido con 215 y según el portal Statista.

Por su capacidad destructiva, las armas atómicas son un componente esencial en las capacidades de disuasión y defensa de cualquiera de estas potencias. Sólo que en el caso de Putin, las insinuó para detener las sanciones y presiones internacionales por su ilegal invasión a un estado soberano vecino.

La mañana del 11 de Febrero, cuatro viejos pero imponentes bombarderos B-52 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos aterrizaban en la base militar de Fairford, en el suroeste de Inglaterra. Las aeronaves dejaron su base habitual en Dakota del Norte, para adelantar sus ejercicios anuales en Europa debido a la inminencia de la invasión rusa de Ucrania, que el presidente Joe Biden venía advirtiendo con insistencia.

A su llegada, previo al inicio de la guerra en Ucrania, la Real Fuerza Aérea británica aseguró que «los B-52 llegaron al Reino Unido previo a una apretada agenda de misiones de entrenamiento con el Comando Europeo y el Comando Estratégico de los Estados Unidos».

Sin embargo todo ha cambiado y tras 30 días de guerra, los presidentes y jefes de gobierno de la OTAN frente a «una nueva normalidad para la seguridad europea» decidieron en una cumbre extraordinaria en Bruselas «el reinicio de la disuasión y defensa creíbles no para provocar un conflicto, sino para prevenir el conflicto» señaló el jefe de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg.

Mientras Moscú entienda claramente nuestra disposición para proteger y defender cada centímetro del territorio de la OTAN, entonces no habrá ataqueJens Stoltenberg, Secretario general de la OTAN (25 marzo)

Precisamente, este vuelo que es público, pero no publicitado, es la muestra de que la Alianza Atlántica es también una alianza atómica, como lo señaló el ministro francés de exteriores, y está dispuesta a reiniciar una disuasión creíble como lo aseguró el jefe de la OTAN.

A lo largo de este martes, según se puede apreciar en la web especializada Flightradar24, dos de los cuatros B-52 estadounidenses, despegaron de suelo británico para sobrevolar por varias horas el espacio aéreo de Rumanía, relativamente cerca de la frontera con Moldavia. Pero no han sido las únicas aeronaves de la OTAN en el flanco Este, pues también estuvieron acompañados de un Boing E-3A de reconocimiento, monitoreo e inteligencia de Países Bajos, puesto al servicio de la Alianza Atlántica.

El día escogido para estos vuelos de bombarderos, que representan la máxima capacidad ofensiva por la posibilidad de operar armas atómicas, no es una coincidencia. Este 29 de marzo se cumplieron 18 años desde que Rumanía se convirtió en miembro de pleno derecho de la OTAN.

Es importante recordar que este miembro de la Alianza Atlántica procede de la órbita soviética y fue parte del Pacto de Varsovia el contrincante de la OTAN y Estados Unidos durante la Guerra Fría, misma época en el que los sobrevuelos de los B-52 estadounidenses y los Tu-95 soviéticos (también con capacidad nuclear) era cotidiano.

La OTAN es fuerte con Rumanía y Rumanía es fuerte en la OTANJens Stoltenberg, Secretario general de la OTAN

El ministerio de defensa rumano, citó en su cuenta de Facebook, las palabras de Stoltenberg para explicar el actual vínculo Occidental de la antigua república soviética: «La OTAN es fuerte con Rumanía y Rumanía es fuerte en la OTAN». El 2 de abril de 2004, se celebró la ceremonia de izamiento oficial de la bandera rumana en la sede de la OTAN y a partir de 2005, el «Día de la OTAN en Rumanía» se celebra el primer domingo de abril de cada año.

Pero el inusual vuelo de los legendarios bombarderos estadounidenses, en el flanco este de la OTAN, y muy cerca del Mar Negro desde donde el ejército ruso lanza misiles, tiene lugar el día en que los negociadores ucranianos y rusos se reunían en Turquía para intentar poner fin a la guerra de invasión. Dicho encuentro, es el cuarto de manera presencial y el primero oficial en bajo el auspicio del presidente Recep Tayyip Erdoğan en Estambul y podríamos decir que se desarrolló bajo la 'sombra de la amenaza nuclear disuasiva'.