55 DIAS DE GUERRA
El Pentágono no da por perdida la ciudad de Mariúpol
«Nuestra evaluación es que Mariúpol todavía está en disputa», asegura Estados Unidos
La batalla crucial para el desenlace de la guerra se da ahora en Mariúpol. El objetivo o la joya de la corona del Donbás, es el trofeo que necesita con urgencia Vladimir Putin para poder mostrar a Rusia y al mundo, una victoria real.
En las últimas horas todo parecía indicar que el golpe final a Mariúpol era inminente. Rusia lo presentaba tan evidente que hasta ofreció el fin de semana perdonar la vida a los sobrevivientes si se prestaban a una rendición. Pero el puñado de milicianos y soldados del ejército ucraniano que se atrinchera entre los pocos muros que quedan en alto en la ciudad, se negaron a ondear una bandera blanca después de tanta sangre derramada por las fuerzas de ocupación.
Diferentes estimaciones aseguran que la resistencia se concentra en la fábrica de acero Azovstal donde el batallón Azov, el que más odia Putin, no está dispuesto a entregar las armas.
Estos combatientes, identificados con movimientos nazis, están dispuestos a dejarse la vida en la batalla pero reclaman un corredor humanitario para la evacuación de heridos, muertos y civiles hambrientos que quieren huir de la guerra.
Vencido el lunes por la tarde el ultimátum que Moscú les dio, las fuerzas del Kremlin no actuaron de inmediato. La artillería y los bombardeos aguardaron a que entrara la noche. La madrugada ha sido dura pero los anuncios de Rusia de que la conquista era un hecho consumado, al menos por ahora son falsos.
La afirmación surge del mismo Pentágono: «Nuestra evaluación es que Mariùpol todavía está en disputa». Estados Unidos, todavía y en contra de la opinión general, no da por perdida la ciudad portuaria, la única con salida al mar de Azov.
Pese a todo si, como parecería, las fuerzas rusas terminan haciéndose con el control de Mariúpol, Ucrania se quedaría únicamente con el puerto de Odesa como salida al Mar Negro. El efecto en la estrategia rusa sería, además, otro: desplegar una docena de grupos tácticos de infantería para neutralizar el resto de los focos del Donbás que se resisten a entregarse al enemigo.
De acuerdo a los informes de inteligencia de Estados Unidos, Rusia dispone de 76 grupos tácticos de batallón diseminados por el Donbás y el sureste de Ucrania. En los últimos días, desde que el general Alexander Dvornikov, conocido como «el carnicero de Siria», se hizo con las riendas de la guerra se incorporaron once más.
Los túneles de Mariúpol
Según estos informes, no son pocos los ucranianos que se esconden en refugios en Mariúpol. Los cálculos indican que en los túneles de la planta de Azovstal habría unas mil personas atrincheradas, en su mayoría mujeres, niños y ancianos.
Las fuerzas rusas, tras cambiar su estrategia, lograron avanzar en su conquista de territorio en Mariúpol. Según EE.UU. unos 40.000 civiles fueron trasladados por la fuerza a Rusia o a zonas de Ucrania bajo control de las fuerzas de Putin.