Una niña sobrevive a la masacre de Texas al mancharse de sangre y hacerse pasar por muerta

La familia de una niña de 11 años que sobrevivió a la masacre en la escuela primaria Robb en Uvalde, Texas, explicó que la niña de cuarto grado se hizo la muerta después de que el hombre armado ingresó y disparó en su salón de clases.

La tía y la madrina de Miah Cerrillo dijeron que la niña está luchando para sobrellevar la situación y les cuenta lo que presenció durante el tiroteo.

Según su padre, Miah pasó la noche en estado de pánico y le dijo a su padre que se armara porque «[el pistolero] va a venir a buscarnos».

Miguel Cerrillo, el padre de Miah, le dijo al Washington Post que cuando se enteró del tiroteo, corrió a la escuela y llegó justo a tiempo para ver a un oficial de policía sacar a su hija ensangrentada del edificio.

La maestra de Miah, Irma García, fue una de las dos maestras asesinadas. La alumna de cuarto grado le dijo a su padre que vio cómo le disparaban a su maestra mientras sostenía su teléfono. Luego la niña tomó el teléfono de García y lo usó para marcar el 911.

Los amigos y compañeros de clase de Miah también fueron atacados y forman parte de los 19 niños asesinados el pasado martes.

Según los familiares de la niña, «Miah tomó un poco de sangre y se manchó para poder fingir que estaba muerta». Según el relato que recoge la NBC, «la niña vio a su amiga llena de sangre y se la puso encima».

Miah, sin embargo, tenía fragmentos de bala en la espalda y fue llevada al hospital donde luego fue dada de alta. Ahora toda la familia Cerillo se está uniendo a ella para ayudarla a recuperarse física, emocional y espiritualmente.

Miah es una de los cinco hijos de su familia. Su hermana menor es una estudiante de segundo grado en la Escuela Primaria Robb y no resultó herida en el tiroteo.