Las 13 razones que exponen los tories para destituir a Boris Johnson

Boris Johnson, primer ministro británico, ofrecía una imagen de resistencia o efecto teflón insuperable por cualquier otro político. Ha toreado a los suyos y a los otros, pese a los informes oficiales y de la Policía, pero se le ha acabado la magia de la impunidad.

Las fiestitas de Downing Street mientras el resto de Gran Bretaña sufría las restricciones del confinamiento por el Covid, parecían -hasta hoy- una raya más en la piel del tigre político que es Boris Johnson.

El premier había logrado escurrir las responsabilidades por sus escándalos demasiado tiempo. Lo que no consiguió Sue Gray ni Scotland Yard, parecería que lo puede lograr la gente y la crónica anunciada de una derrota en las elecciones del partido conservador.

Los tories estaban dispuestos a digerir todos los sapos de este animal político que es Johnson, con tal de conservar el poder, lo que no pueden tolerar más es dirigirse al cadalso de las urnas si pueden evitar ese camino que les enseñan los sondeos.

Sondeos y abucheos

Por esto y por los abucheos de fondo en sus apariciones públicas durante la conmemoración de los 70 años de reinado de Isabel II, Johnson podría tener que empezar a preparar pronto las maletas, de esa pequeña calle que es Downing Street y salir del 10, con un 0 por su conducta.

El grupo rebelde que le lleva mordiendo los talones para que dimita elaboró un documento donde expone las trece razones por las que Johnson debe marcharse. El diario The Times reproduce parte de este memorándum donde sus colegas le comparan con el líder laborista Jeremy Corbyn, un socialista radical que puso al partido en jaque y terminó obligado a salir por la puerta de atrás del partido.

«La única forma de restaurar la confianza en el movimiento conservador es destituir a Boris Johnson como primer ministro». Esta es la conclusión a la que llegan sus compañeros de filas tras enumerar esas 13 razones por las que debe irse del partido y del Gobierno.

El sector que se enfrenta a Johnson hizo circular el documento el domingo con la firma de 54 diputados, el número mínimo que se necesita para poder plantearle un voto de confianza o moción de censura. Pero, la prueba definitiva no sería en esta ronda sino en al siguiente donde se necesitan 180 votos de sus correligionarios para cesarle como cabeza del partido.

Cesarle como premier

En rigor, Boris Johnson puede ser destituido como cabeza del partido pero no hay nada escrito que le obligue a renunciar como premier. Dicho esto, la tradición impone que al abandonar un cargo se deje el otro. «Resulta bastante grave -advierten- que un primer ministro conservador sea abucheado por personas que se presentaron para ser testigos de cómo llegaban personalidades a un servicio religioso en honor de la Reina».

Escraches a Johnson

Pero el abucheo que mencionan los enemigos de Johnson no es el primero que soporta el ex periodista y polémico premiar británico. Los «escraches» le han sucedió hasta en Morito, el restaurante de su hijo Theo y su reacción fue, según The Mail on SUnday, directamente proporcional a su soberbia: «hizo un gesto de desprecio con la mano y se fue», recuerda.

«El daño causado a la confianza en Boris Johnson es tal que las políticas populares están fracasando con el púbico (por ejemplo, las medidas del costo de vida). Un encuestador lo ha apodado el “conservador Corbyn por esto», dice el diputado.

Otro parlamentario citado por The Times que hizo circular la carta reflexiona : «los que apoyan a Boris Johnson son como Corbytas cuyo amor por su líder los mantuvo inmunes a cualquier opinión fuera de sus cámaras de eco».

Johnson es un viejo zorro y con certeza, estará negociando para tratar de escapar a la última embestida de los suyos. Un dato tiene a su favor o en contra, según se mire: la votación es secreta.