Ataque ruso a Ucrania
463 días de guerra en Ucrania
Una 'influencer' ucraniana revela la ubicación de un hospital de campaña que es bombardeado por Rusia
El ataque acabó con la vida de cuatro personas
Una reconocida influencer ucraniana ha sido objeto de duras críticas por revelar la ubicación de un hospital de campaña que, horas después, fue bombardeado por Rusia.
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La intención de la Anna Alkhim, que cuenta con 600.000 seguidores en Instagram, era en principio buena. Alkhim quería recaudar material para el hospital, ubicado en la ciudad de Dnipro, en el este de Ucrania. La influencer, en su publicación, recalcó que en las instalaciones se encontraban soldados ucranianos heridos.
Alkhim no se dio cuenta que al hacer pública esta información, estaba dando la localización también a sus enemigos. Horas después, un ataque ruso con misiles alcanzó el hospital de campaña, matando a cuatro personas e hiriendo a otras 30, entre ellas dos niños de tres y seis años.
El ataque, que acabó con el edificio convertido en un montón de escombros en llamas, fue condenado por el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, como un crimen contra la humanidad.
Anna Alkhim influencer
En su mensaje, Alkhim afirmó que los hospitales números 6 y 9 estaban atendiendo a un gran número de militares. Al parecer, la joven borró después su mensaje, que contenía información considerada sensible sobre el Ejército ucraniano y el hospital.
Tras las múltiples críticas recibidas, la influencer se defendió explicando que «en primer lugar, hice una publicación ayer, porque la mitad de los habitantes de Dnipro ya lo habían hecho».
Además, añadió que era «una de las pocas influencers que llena sus historias y su feed con publicaciones sobre la guerra. He sido voluntaria y he apoyado a Ucrania desde los primeros días de la invasión».
El Ministerio de Defensa ucraniano calificó el ataque de grave crimen de guerra en virtud de los Convenios de Ginebra, que establecen cómo deben ser tratados los soldados y los civiles en la guerra.
Por su parte, el gobernador regional, Serhiy Lysak, declaró que un hombre de 69 años había muerto al pasar por delante de la clínica y que el cadáver de otro hombre había sido sacado de entre los escombros. Posteriormente, el número de muertos se elevó a a cuatro.
