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Kalashnikov colegio Rusia

Una niña empuña un Kalashnikov en una escuela rusa©GTRESONLINE

468 días de guerra en Ucrania

«A, de ama a tu Ejército», la cartilla de Putin del abcedario y sus planes de adoctrinamiento

Hasta para enseñar matemáticas se recurre a la figura de «francotiradores», «Héroes entre nosotros» o «lecciones de valor», forman parte del nuevo plan de estudios del Kremlin

Vladimir Putin, viejo y cruel zorro de la política, sabe que el adoctrinamiento en edades tempranas es fundamental para tener sometida a la población el día de mañana. La invasión de Ucrania y el malestar causado entre los rusos ha venido a reforzar su posición. Con ese objetivo ha incorporado una nueva forma de aprender el abecedario y hasta enseñar «matemáticas» se ha convertido en una fábrica de fanáticos.

La A para «Ama a tu ejército», y así sucesivamente, la cartilla para aprender el alfabeto ruso sirve para ensalzar a las Fuerzas Armadas y el uniforme de combate para que los adolescentes se enfunden en él y se arrojen a la piscina a demostrar sus habilidades. Otros prefieren cargar con el Kalashnikov, pero nada comparado con lo que se imparte en las clases de matemáticas.

Es en esta asignatura el tema de debate puede ser -fue- «francotiradores» y la operación para que tenga algo que ver con la materia, una estrella de papel sobre la que enumeran posibles agujeros de baja en un objetivo dibujado en la pizarra.

«Conversaciones importantes»

Todo es importante para moldear las jóvenes mentes rusas. En este esquema entra en juego un plan determinante desde temprano. El programa bautizado «Conversaciones importantes» que comenzó el pasado mes de septiembre y que establece a que todos los lunes a las 8 de la mañana los colegios deben concentrarse para el alzamiento de la bandera mientras suena el himno nacional para pasa a renglón seguido a recibir una clase de de una hora de duración sobre grandes gestas de la historia del país.

«Queremos que la generación actual de escolares crezca en tradiciones completamente diferentes, orgullosos de su tierra natal», trató de justificar el ministro de Educación, Sergei Kravtsov en su canal de Telegram donde hizo oídos sordos a las preguntas que le formularon por escrito.

«Lecciones de valor» y «Héroes entre nosotros»

Junto a «Conversaciones importantes» se desarrollan programas como «Lecciones de valor» o «Héroes entre nosotros» que, en paralelo, muestran vídeos de niños en escuerlas recitando poesías con letras como: «Todos los ladrones están huyendo de Rusia; tienen un lugar para vivir en Occidente; mafiosos, sodomitas.»

La guerra avanza y con ella los diferentes programas educativos con la exaltación de la patria y actividades extraescolares destinadas a alimentar el nacionalismo a ultranza y el militarismo. El objetivo de Putin es, prácticamente, militarizar a la sociedad rusa y convencer a la gente de que la Federación Rusa está bajo amenaza de una guerra.

La historia, vomo recuerda el New York Times, viene de lejos. Los planes de Putin empezaron a concretarse tras la anexión de la península de Crimea en 2014, pero la prolongación de la invasión a Ucrania no ha hecho más que acelerar sus planes.

El ministerio de Educación y Ciencia difunde sistemáticamente material con panegíricos hasta de los servicios de Inteligencia

El ministerio de Educación y Ciencia difunde sistemáticamente material con panegíricos hasta de los servicios de Inteligencia que tan bien conoce el antiguo agente de la extinta KGB.

El método utilizado en este caso, como ha podido comprobar el diario estadounidense, consiste en la celebración de conciertos de estudiantes con poemas, danza y teatro que utilizan para hacer un recorrido sobre su «gloriosa historia».

Están tratando de involucrar a todos estos niños, a todos los estudiantes, directamente para apoyar la guerraDaniil Ken, líder del sindicato ruso independiente Alianza de Maestros

Daniil Ken, líder del sindicato ruso independiente Alianza de Maestros, que trabaja desde el exilio, resume la situación para el New York Times. «Están tratando de involucrar a todos estos niños, a todos los estudiantes, directamente para apoyar la guerra».

Pero, como todo método hay que ajustar bien el engranaje porque siempre existe el riesgo de que se vuelva un bumerang para los que hoy ostentan el poder.

Si presionan demasiado, podrían impulsar una oposición organizadaAlexandra Arkhipova

«Quieren entusiasmo, pero se dan cuenta de que si presionan demasiado, podrían impulsar una oposición organizada», reflexiona la antropóloga social Alexandra Arkhipova. Dicho de otro modo, «no quieren que la gente proteste».

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