Namer, el ultra blindado vehículo de combate que usa Israel para transportar a sus soldados en Gaza
En abril de 1975 dio comienzo la compleja Guerra Civil libanesa. En aquellos momentos el Líbano era un país extremadamente inestable a consecuencia de un sinfín de tensiones políticas y religiosas en la región. El Estado de Israel pronto se vería involucrado en dicho conflicto bélico.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se vieron inmersas en una compleja guerra de guerrillas y en intensos combates urbanos, uno de los escenarios menos apropiados para emplear vehículos blindados. El principal vehículo blindado de transporte de tropas de los que Israel disponía entonces era el M-113 de origen estadounidense, el bien conocido Transporte Oruga Acorazado (TOA) del Ejército de Tierra español.
El M-113, que había entrado en servicio en 1960, fue el primer vehículo de combate producido en masa cuya barcaza estaba fabricada con aluminio. Esta característica lo convertía en un vehículo muy ligero, haciendo que fuese parcialmente anfibio y aerotransportable. Sin embargo, el limitado espesor de su blindaje proporcionaba protección a sus tripulantes y pasajeros únicamente frente a armas ligeras. Esto lo hacía extremadamente vulnerable por lo que las tropas de las FDI sufrieron un enorme número de bajas.
Israel inmediatamente identificó la necesidad de desarrollar un vehículo de transporte de tropas de infantería propio, ajustado a su doctrina militar.
Solución transitoria
Para paliar de forma temporal la situación, Israel recurrió a la fabricación de una serie de blindados de transporte de tropas reutilizando vehículos obsoletos que tenía en inventario. Entre éstos pueden destacarse el Nagmachon, basado en el carro de combate Sho't (designación israelí del Centurión británico) y el Achzarit, que fue desarrollado a partir de los carros T-54 y T-55 de origen soviético que habían sido capturados a Siria y Egipto durante la Guerra de los Seis Días. Aunque el Nagmachon y el Achzarit disponían de un blindaje extremadamente efectivo, se trataba de una solución transitoria ya que mostraban muchas limitaciones operativas.
Israel comenzó a explorar la posibilidad de utilizar el carro de combate de factura nacional Merkava como base para crear el nuevo vehículo de combate de infantería. Sin embargo, limitaciones presupuestarias impidieron que el proyecto fraguase.
La idea de desarrollar un vehículo blindado de transporte de tropas volvió a tomar impulso tiempo después, fundamentalmente a raíz de los conflictos en los que Israel se vio involucrado desde principios de los años 2000 cuando comenzó la Segunda Intifada. Así, en 2004 se tomó la decisión firme de construir el primer vehículo blindado de transporte de tropas israelí para satisfacer las crecientes necesidades de sus Fuerzas Terrestres.
Namera y Namer
El carro de combate Merkava era el candidato perfecto para ser reconvertido en vehículo de combate de infantería. La posición del motor en la parte frontal del ingenio permitía situar en la parte trasera del blindado el compartimiento de tropa y el portón. De esta forma era posible embarcar y desembarcar a cubierto. Por otra parte, la utilización de las barcazas de los Merkava I permitiría reciclar los carros de combate que estaban siendo dados de baja. El vehículo blindado resultante, denominado Namera, fue presentado oficialmente en el año 2005.
Sin embargo, poco tiempo después Israel descartó proseguir con el desarrollo del Namera, puesto que se hizo patente que era más sencillo y económico fabricar un blindado utilizando la barcaza del moderno Merkava IV. Además, de esta forma se podrían aplicar en la fabricación de nuevo blindado las lecciones aprendidas durante la Segunda Guerra del Líbano de 2006. Fue así como nació el vehículo de combate de infantería Namer, cuyo desarrollo comenzó en 2007 y fue presentado al público en 2008.
El vehículo blindado Namer comparte muchas de las características básicas de diseño de su predecesor, el Namera. Así, el motor está ubicado en la parte delantera, mientras que el compartimento de tropa se localiza en la parte trasera. Al igual que el carro de combate en el que se basa, en el Namer la protección de sus ocupantes es prioritaria. De hecho, gran parte de la reducción de peso obtenida al eliminar la torre del Merkava IV se volvió a ganar con el blindaje.
La tripulación del Namer está compuesta por conductor, artillero y jefe de vehículo, además de un máximo de ocho fusileros. El conductor está situado en la parte delantera izquierda del vehículo, al igual que en el Merkava. El jefe de vehículo y el artillero están situados, respectivamente, a la izquierda y a la derecha de la barcaza, algo detrás de la posición del conductor.
En servicio
El bautismo de fuego a gran escala del vehículo de combate de infantería Namer se produjo durante la operación Margen Protector en el verano de 2014. Durante las correspondientes operaciones militares, Israel libró intensas batallas urbanas, e incluso subterráneas, contra Hamás.
El Namer evidenció ser extremadamente valioso en un entorno operativo complejo, demostrando su capacidad de transporte de tropas con total seguridad. De hecho, no se perdió ningún Namer durante el citado conflicto. Estos vehículos blindados llegaron a ser utilizados como refugios antiaéreos temporales para las tropas israelíes.
A pesar de que la producción del Namer ha sido relativamente lenta, se estima que en la actualidad Israel dispone de unos 120 vehículos en estado operativo. Se espera que las Fuerzas de Defensa de Israel pueda disponer de unos 530 blindados en el año 2027.