Von der Leyen, notre amour
Von der Leyen ha logrado la gesta histórica de conseguir que en Polonia vuelvan a gobernar los comunistas. Eso sí, en alianza con los socios del PP y del PSOE
El Partido Popular del Europarlamento ya tiene candidata a presidir la Comisión Europea y es la actual presidente, Ursula von der Leyen. Alemana renana, que fue ministra de Angela Merkel, primero muy controvertida en el ministerio de Familia, después una catástrofe nada controvertida en el ministerio de Defensa, fue un compromiso de última hora que se sacaron de la chistera Macron y Merkel en 2019 tras muchas otras iones fallidas.
El Partido Popular parece muy contento con el balance porque la vuelve a presentar. Aunque en 2019 solo salió elegida por 9 votos entre 706 y todo gracias a los ilusos de los conservadores polacos que creyeron en su promesa de que por fin la Comisión Europea con ella respetaría a un gobierno de derechas en Polonia. Votaron a favor de ella y contra el voto de todos sus compañeros del grupo ECR, entre ellos VOX, y muy pronto entendieron el terrible error de haber creído a esta alemana que se decía no sectaria y abierta a todas las ideas y aportaciones.
Lo cierto es que en pago por aquel cándido voto a favor, Von der Leyen ha sido la inductora de una política de acoso, difamación, desinformación y bloqueo económico al gobierno conservador de Polonia hasta lograr, con ayuda de Alemania, acabar con el mismo. Hoy gobierna en Polonia la llamada Plataforma Cívica (OP) de Donald Tusk en alianza con socialistas y comunistas. Sí, Von der Leyen ha logrado esa gesta histórica de conseguir que en Polonia vuelvan a gobernar los comunistas. Eso sí, en alianza con los socios del PP y del PSOE.
La toma del gobierno por Donald Tusk, como Alberto Núñez Feijóo hombre de las filas de Von der Leyen, se ha producido con estrépito, asalto a los medios de comunicación, detención e intimidación de opositores y la peor campaña de desinformación habida en Polonia desde que se fue el general Wojciech Jaruselski. Pero Von der Leyen ha ido ahora a Polonia y no le han molestado ninguno de los brutales abusos del nuevo gobierno de Tusk contra la nueva oposición. Y ha anunciado al jefe de gobierno y a sus socios socialistas y comunistas que los colmará de bienes, de miles de millones de euros, todo ese dinero que irregularmente le había bloqueado al anterior gobierno para lograr movilizar al electorado contra el mismo.
Von der Leyen engañó a los polacos, salió elegida por nueve votos y se convirtió de golpe en la réplica de Greta Thunberg entrada en años, con unos discursos incendiarios contra el negacionismo y la ultraderecha. Siendo para ella la ultraderecha los conservadores, entre ellos los polacos que le habían dado su voto a cambio de promesas de pluralidad y respeto. El negacionismo incluye a todos aquellos que se oponen a la ingeniera social inspirada por el ecologismo radical y la histeria climática de los Verdes y el intervencionismo y centralismo burocrático de los socialistas. Que triunfan gracias a esa adhesión incondicional del Partido Popular Europeo bajo el mando de la señora Von der Leyen.
Von der Leyen ha sido la madre del Pacto Verde, la implacable guardiana de la deriva hacia un estado centralista en el que cada vez exista menos subsidiaridad y más controles masivos desde Bruselas de una red de reglamentos, leyes y directivas que hacen angustiosamente difícil la vida a unos sectores de la población y absolutamente imposible a otros. La prepotencia socialdemócrata, ecologista y woke de esta supuesta cristianodemócrata alemana ha creado la mayor desafección jamás habida hacia la Unión Europea. Y hoy hasta su partido que ha estado todos los cinco años de la legislatura sin protestar por la terrible dirección que había tomado la política contra la agricultura, la ganadería, la industria agro-alimentaria, la industria en general, la investigación, la energía y el transporte y todos los sectores afectados por este frenesí regulador.
Von der Leyen no es culpable de que los populares, los socialistas voten prácticamente lo mismo siempre en el Europarlamento. Hasta en el 89 % de las votaciones en esta legislatura aunque ahora antes de las elecciones los populares empiecen a verle pegas al seguidismo automático a socialistas, liberales y verdes. Von der Leyen sí es culpable de haber llevado a la comisión y a esa mayoría hacia una radicalidad ideológica centralista, intervencionista y eco-climático-histérica que hace un daño infinito a las naciones.
En beneficio de Von der Leyen hay que decir que su radicalidad y despotismo han ayudado mucho a abrir los ojos a cada vez más amplios sectores de las sociedades europea. Y su elección como jefa europea de los partidos populares de las diversas naciones, incluido el PP español, deja muy claro que su intención es proseguir con la política que está causando desastres sin fin en Europa. Los pronósticos electorales sugieren que los europeos lo han notado. Los únicos grupos que suben en las encuestas son los dos a la derecha del PP que son el ECR con Vox y los conservadores polacos del PiS y Fratelli de Italia de Meloni por un lado y el ID con los franceses de Le Pen, la Lega y el AfD por el otro. Todos los demás, incluido el PP de Von der Leyen y Feijóo bajan.
Así las cosas se pueden esperar muchos movimientos en la derecha europea que por primera vez puede formar una mayoría dejando fuera a socialistas, liberales, verdes y comunistas. Lo que está claro es que el PP va hacia un desgarro entre aquellos en sus filas que todavía tengan algo de conservadores y los que son abiertamente socialdemócratas. Y claro está que Von der Leyen no contará con los votos de los conservadores polacos esta vez.