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El Mar de Japón es escenario de las tensiones geopolíticas de la zona

El Mar de Japón es escenario de las tensiones geopolíticas de la zonaAFP

China y Rusia intensifican su cooperación militar con ejercicios navales en el Mar de Japón

La nueva fase de la cooperación se caracteriza por el uso de munición real

Las maniobras navales conjuntas entre China y Rusia en el Mar de Japón han entrado en su segunda fase, marcando un hito significativo en la cooperación militar entre ambas naciones. Esta fase se caracteriza por el uso de munición real, una indicación clara de la seriedad y profundidad de los ejercicios, tal como informa el diario nacionalista chino Global Times.

Desde la ceremonia de inauguración el sábado pasado, buques de guerra de ambos países han zarpado del puerto de Vladivostok hacia las áreas designadas para los ejercicios. Según el Ministerio de Defensa ruso y el Ejército Popular de Liberación (EPL) de China, los ejercicios abarcarán una variedad de escenarios, que incluyen escolta marítima y aérea, defensa aérea y antimisiles, y prácticas de tiro con artillería real.

Un comandante chino enfatizó que las maniobras, denominadas «Beibu/Interacción 2024», reflejan un «mecanismo maduro» de cooperación militar. A medida que los escenarios se aproximan a situaciones de combate real, ambos países están demostrando su capacidad para operar juntos en el ámbito militar.

Participando en estas maniobras, los destructores chinos Xining y Wuxi, junto al buque de abastecimiento Taihu, se han unido a las fuerzas rusas, que incluyen el buque cazasubmarinos de gran envergadura Admiral Panteleev y otros navíos de la Flota del Pacífico rusa. Las actividades de esta semana incluyen la defensa contra ataques aéreos y navales, así como la navegación conjunta en condiciones de seguridad limitada.

La primera fase de estos ejercicios se llevó a cabo en el Mar de Ojotsk, coincidiendo con los ejercicios estratégicos rusos «Océano-2024». Además, la semana pasada, guardacostas de ambos países realizaron maniobras de patrulla conjunta en el océano Pacífico, amparadas por acuerdos internacionales para la conservación de recursos biológicos marinos.

Analistas militares observan que la creciente interacción entre las fuerzas armadas de China y Rusia no solo es un signo de cooperación estratégica, sino también una respuesta a las tensiones geopolíticas en la región. En el contexto de las acusaciones occidentales de que China está suministrando armas a Rusia en el conflicto en Ucrania —lo cual Pekín ha negado— estas maniobras pueden verse como un esfuerzo por parte de ambos países para fortalecer sus lazos y mostrar una postura unida ante la comunidad internacional.

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