Meloni y Von der Leyen excluyen a Sánchez para frenar la inmigración en Europa

la cumbre de la Unión Europea (UE) se ha disfrazado para discutir el 'Plan de la Victoria' presentado por Zelenski. También, se han reunido con los países del Golfo como Baréin, Kuwait, Omán, Qatar, Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos (EAU) para que influyan positivamente en los conflictos de Oriente Próximo y Ucrania.

Lo cierto, es que la primera ministra de Italia, Georgia Meloni, ha reprogramado un encuentro con líderes afines a su plan de Albania para tratar de esbozar una puesta en común. Contando con la República Checa, Alemania, Dinamarca, Grecia, Finlandia, Francia, Hungría, Italia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Suecia y Eslovaquia. Además de Suiza y Noruega (que no están en la UE pero sí en el espacio Schengen).

La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni ha decidido excluir a España de las conversaciones para disminuir la inmigración que llega a Europa.

Se espera que los mandatarios de la UE, que sí están convocados, discutan este jueves en Bruselas un drástico endurecimiento de su política migratoria. Parece que estas quince naciones se acercan a las posturas planteadas por el bloque de la derecha europea.

Meloni afirmó que existe «un deseo de trabajar en soluciones pragmáticas», según informa EFE. Es decir, pretenden buscar medidas conjuntas y útiles para tratar la inmigración.

Los discutidos centros de deportación

La UE se plantea crear centros en países fuera del bloque, donde reunir a esos inmigrantes antes de su transferencia a sus países de origen. Se trata de los controvertidos deportation hubs o centros de deportación.

Uno de los temas principales versará sobre el lanzamiento del proyecto de expulsiones de inmigrantes irregulares de Italia hacia Albania. Recordemos que por ese acuerdo, Italia negoció con Albania la apertura de un centro de deportación en la región de Gjader. Un lugar donde ya fueron enviados inmigrantes que, posteriormente, serán expulsados a sus naciones.

Meloni presentó en la mañana del jueves detalles de ese acuerdo con Albania, en una reunión con un selecto grupo de países. Hay que añadir que Albania aspira a ser miembro de la UE y toda ayuda a los países miembros le beneficia.

Hace cinco meses, la UE ya adoptó un Plan de Migración y Asilo que parece insuficiente. Diversos países buscan nuevas medidas que agilicen los procesos de deportación.

Aunque la agenda de la cumbre también incluye asuntos como la guerra en Ucrania y la explosiva situación en Medio Oriente. Pero es el tema migratorio, algo encubierto, el que ocupará el lugar central de este y otros encuentros.

Nuevo escenario político, ¿sin España?

La idea de los centros de deportación, no obstante, enfrenta resistencias. «No creemos que la discusión aún esté madura, ni que los 'hubs' sean una solución», dijo un diplomático europeo.

El jefe del gobierno de Alemania, el socialista Olaf Scholz, señaló este jueves que «si todos seguimos las reglas que tenemos, ya estaríamos más avanzados».

Sin embargo, más allá de las reticencias, es innegable que el avance y fortalecimiento de partidos de derecha en Europa ha hecho que la expulsión de inmigrantes no aceptados se sitúe en el centro de la agenda política.

Alemania reforzó recientemente sus controles fronterizos en respuesta a sospechas de ataques islamistas.

A su vez, el gobierno conservador de Polonia adelantó que suspendería parcialmente los derechos de asilo, y acusó a Rusia y Bielorrusia de enviar oleadas de inmigrantes para desestabilizar al país.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, envío una carta de los Veintisiete donde discutió la necesidad de facilitar las deportaciones.

En su mensaje, Von der Leyen incluso pidió «explorar» «soluciones innovadoras», como estos centros de retorno fuera de la UE, desde donde esas personas serían devueltas a sus países.

Von der Leyen sugirió que era preciso sacar «lecciones» del controvertido acuerdo entre Italia y Albania.

Por el momento, España ha expresado de manera firme su oposición a la idea, y propone concentrarse en la implementación plena del Pacto de Migración y Asilo.

Según un diplomático europeo, aún no existe «ningún plan» sobre esos centros, ya que el debate es aún «muy preliminar». Por lo tanto difícilmente habrá «decisiones importantes» sobre el tema en esta cumbre. Sin embargo, los avances para fortalecer las restricciones a la inmigración parecen innegables.

El PPE pide aumentar los retornos

Los líderes del Partido Popular Europeo reclamaron este jueves una nueva Directiva de Retorno para que las personas que no tengan derecho a asilo en la Unión Europea sean devueltos a sus países o a países terceros de manera rápida y efectiva. Así como «extraer lecciones» del acuerdo entre Italia y Albania que incluye centros de retorno en terceros países.

«Deberíamos estar dispuestos a aprender lecciones ahora que entramos en la fase de implementación del acuerdo entre Italia y Albania. Con el mismo espíritu, deberíamos explorar opciones para centros de tránsito de retorno que alivien la presión de nuestros sistemas de recepción y asilo», señalan los populares europeos en un comunicado, suscrito también por el PP.

Dichos centros de retorno y, en general, la búsqueda de «soluciones innovadoras» para aliviar la presión migratoria en las fronteras exteriores de la UE están sobre la mesa de los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea para su cumbre de este jueves en Bruselas.

Estas ideas estaban reflejadas ya en la carta que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, envió a los líderes europeos el pasado lunes con vistas a la cumbre, que incluían la mención a las «soluciones innovadoras» para gestionar la migración y acelerar las devoluciones de irregulares.

En una rueda de prensa posterior a la cumbre del PPE y preguntado reiteradamente sobre su postura respecto a estos centros, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, subrayó que «no hay una fórmula mágica» que funcione para todos los países y aseguró que España tiene que centrarse en resolver los problemas de Canarias y recurrir a la ayuda de Frontex (Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas), tal y como informa EFE.

El Partido Popular Europeo afirma también en su declaración que la Directiva de Retorno de 2008 debe seguir siendo válida «hasta que sea reemplazada por una nueva regulación» que piden «de manera urgente», de forma que asegure la aplicación efectiva de las devoluciones de quien no tiene derecho a estar en la UE.

«Necesitamos reevaluar el concepto de 'tercer país seguro' para aliviar la presión sobre los países de la UE. En el ámbito del retorno, necesitamos más posibilidades con respecto a la cooperación con terceros países para que (cualquier decisión de retorno) se aplique de forma rápida y eficaz», añade la declaración.