El presidente de Eslovaquia, amigo de Putin, acusa a Zelenski de fomentar una Tercera Guerra Mundial

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, mostraba su pesar por el atentado que sufrió, el 15 de mayo pasado, el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico. El político esloveno recibió un disparo de bala tras una reunión de su Gobierno en Handlova (en el centro del país).

En ese momento, hace tan sólo cinco meses, Zelenski catalogaba al estado vecino como «socio». Un gesto hacia Fico que se había declarado prorruso, seis meses antes, nada más comenzar su legislatura.

Además, Fico acaba de comunicar que «es consciente que la guerra ha sido creada por la violación del derecho internacional por parte de Rusia».

Pero, a pesar de estas declaraciones su postura contra Ucrania se ha endurecido definiendo de irresponsable, inviable y poco realista el 'Plan de la Victoria', presentado por Zelenski, del que asegura que nos llevará a una Tercera Guerra Mundial.

El político eslovaco afirma que, mediante la gestión de la guerra que pretende el mandatario ucraniano, «vamos a entregar misiles de largo y medio alcance a Ucrania, que luego lanzará a Rusia».

Además, el dirigente esloveno señala a la Unión Europea por ser «cómplice» de una matanza.

Acusa a los Veintisiete de la UE «por la muerte de eslovenos que se está produciendo sin ningún sentido», y les achaca, al igual que a Zelenski, no tener ningún plan concreto.

Para concluir que «la guerra cuenta con el apoyo de Occidente porque cree que pondrá a Rusia de rodillas a través de este conflicto, pero la realidad es otra», advierte.

Ucrania sin OTAN por Eslovaquia

El esloveno ha dejado clara su posición al negarse públicamente a que Ucrania entre como miembro de pleno derecho de la OTAN. Algo que podría conseguir ya que Eslovaquia tiene derecho de veto y el Gobierno ha expresado su intención de ejercerlo.

En la retransmisión Fico adelantaba que «probablemente sea imposible evitar la invitación, porque serán los grandes Estados los que le dirán a Ucrania que estamos iniciando el proceso de adhesión a la OTAN. No podemos impedirlo. Pero luego se decide en el Parlamento eslovaco. Y hablo por mí y por mi representación política: no apoyaremos esta idea».

Concluyendo que «por eso también he dicho en Bruselas que creo que no es una buena idea llevar a Ucrania a la OTAN, porque amenaza a todo el mundo. Ucrania debe permanecer neutral y recibir garantías de seguridad, pero nada más», sentencia en unas controvertidas declaraciones.