Argentina denuncia hostigamiento contra refugiados venezolanos en su antigua embajada en Caracas
El Gobierno de Milei acusa al régimen de Maduro de presionar con despliegues policiales y exige salvoconductos para los asilados políticos bajo custodia de Brasil
El Gobierno de Argentina, encabezado por Javier Milei, denunció este sábado «actos de hostigamiento e intimidación» en contra de seis opositores venezolanos refugiados en su antigua embajada en Caracas, ahora bajo la protección diplomática de Brasil. Según un comunicado oficial de la Cancillería, las acciones incluyen un despliegue de efectivos armados, bloqueos en las calles aledañas y medidas que comprometen la seguridad de la sede.
Desde marzo de este año, los opositores han permanecido en la embajada argentina tras solicitar asilo político. Entre ellos se encuentran figuras destacadas de la oposición venezolana, como Pedro Urruchurtu, coordinador de Vente Venezuela, y Claudia Macero, coordinadora de comunicaciones del partido. Todos enfrentan acusaciones del Gobierno de Nicolás Maduro por conspiración y traición a la patria.
La Cancillería argentina condenó estas maniobras, que calificó como una violación de las normas internacionales, y llamó a la comunidad internacional a exigir la emisión de salvoconductos que permitan a los asilados abandonar Venezuela de forma segura. A su vez, agradeció al Gobierno de Brasil por asumir la protección de la embajada y los refugiados tras la expulsión de los diplomáticos argentinos en agosto pasado.
Urruchurtu denunció en redes sociales que agentes encapuchados y armados de la Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas (DAET) de la Policía Nacional Bolivariana rodearon la sede y bloquearon sus accesos en días recientes. Este sería el tercer incidente de este tipo desde que Brasil asumió la custodia de la embajada argentina.
El régimen de Maduro revocó en septiembre el permiso para que Brasil representara a Argentina en la protección del recinto diplomático, alegando que los refugiados estarían organizando actos terroristas desde el interior. A pesar de esto, el Gobierno brasileño confirmó que continuará defendiendo los intereses argentinos en Venezuela hasta que el Ejecutivo de Milei designe otro estado mediador.
La situación eleva las tensiones entre los gobiernos de Milei y Maduro, marcando un cambio en la política exterior argentina hacia una postura más dura contra el régimen venezolano. Argentina reafirmó su compromiso con los derechos humanos y la seguridad de los asilados, mientras el conflicto amenaza con escalar en el contexto de una región polarizada políticamente.