Asesinadas más de 180 personas en Haití a manos de una banda armada

al menos 180 personas de la tercera edad han sido asesinadas en Haití con cuchillos y machetes por una pandilla cuyo líder los culpó de haber hecho brujería para que su hijo cayera gravemente enfermo.

La matanza tuvo lugar en Warf Jeremie, un suburbio costero considerado como uno de los más pobres y violentos de Puerto Príncipe, la capital haitiana. Dicha zona está controlada por por un grupo armado liderado por Micanor Altes.

La ONG CDP-Haití informó de que el motivo del ataque fue que Micanor acudió a un sacerdote vudú debido a que su hijo estaba muy enfermo y este le aseguró que dicha enfermedad se debía a que los ancianos le habían echado un mal de ojo. Ante esta noticia la respuesta del líder de la banda fue acabar con todos ellos.

«A pesar de estas acciones, el niño murió el domingo por la tarde», agregó CDP en un comunicado.

La responsable de una fundación que trabaja en la zona desde hace años confirmó a EFE lo ocurrido y aseguró que el pánico y la tensión reinan en la zona.

El Gobierno haitiano no tardó en pronunciarse sobre la noticia asegurando que «movilizará todas las fuerzas para perseguir y aniquilar a estos criminales».

Micanor es un poderoso jefe de banda que controla desde hace muchos años una parte del mayor barrio de chabolas de Haití, Cite-Soleil, en el área metropolitana de Puerto Príncipe, donde la gente vive en condiciones inhumanas, sin los servicios sociales básicos, y gobierna con mano de hierro el área de Warf Jeremie.

Hoy el alto comisionado de Naciones Unidas para los derechos humanos, Volker Türk, indicó que 187 personas murieron este fin de semana en Haití, con lo que el balance de personas asesinadas en medio de la violencia se eleva a unas 5.000 este año.