Panamá responde con firmeza a las amenazas de Trump sobre el Canal: «Cada metro cuadrado pertenece al pueblo panameño»
La comunidad internacional respalda al país tras las controvertidas declaraciones del presidente electo estadounidense
El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, destacó este lunes el respaldo global recibido tras las declaraciones del próximo mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, quien sugirió la posible exigencia de la devolución del Canal de Panamá debido a lo que considera tarifas excesivas y una mala gestión.
Mulino expresó su gratitud a través de un mensaje en X, la red social anteriormente conocida como Twitter: «En nombre de todos los panameños, agradezco las muestras de solidaridad de diversos mandatarios, exmandatarios, líderes de organismos internacionales y compatriotas. Panamá y su Canal seguirán al servicio de sus usuarios y del comercio global. ¡Felices fiestas!».
En una reunión clave realizada el mismo día, los expresidentes Mireya Moscoso, Ernesto Pérez Balladares y Martín Torrijos reafirmaron junto a Mulino que la soberanía del país y del Canal no están sujetas a negociación. En una declaración conjunta, subrayaron la importancia de preservar la independencia nacional frente a cualquier amenaza externa.
Las controversiales afirmaciones de Trump, quien asumirá la presidencia de Estados Unidos el próximo 20 de enero, incluyeron críticas al expresidente Jimmy Carter, responsable de firmar los Tratados Torrijos-Carter que establecieron el traspaso del Canal a Panamá en 1999. Trump calificó la entrega como un error, argumentando que fue «regalado por un dólar», y sugirió que China tiene una influencia indebida sobre su administración. Estas palabras desencadenaron una ola de reacciones negativas tanto en el ámbito nacional como internacional.
Mandatarios como Gustavo Petro de Colombia y Claudia Sheinbaum de México manifestaron su apoyo a Panamá, al igual que el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, quien destacó la necesidad de respetar los acuerdos bilaterales vigentes. Por su parte, el gobierno chino reafirmó su respeto por la soberanía panameña sobre el canal, calificándolo como «una gran obra del pueblo panameño».
El contexto histórico del Canal de Panamá resulta crucial para entender esta controversia. Construido por Estados Unidos e inaugurado en 1914, fue administrado por dicho país hasta su transferencia a Panamá el 31 de diciembre de 1999. Este hito se logró gracias a los tratados firmados en 1977 por el presidente estadounidense Jimmy Carter y el líder panameño Omar Torrijos.
Las declaraciones de Trump coinciden con fechas significativas para Panamá: el reciente 35 aniversario de la invasión estadounidense en 1989 para capturar al dictador Manuel Antonio Noriega y el próximo 25 aniversario de la transferencia del canal. Además, el Canal de Panamá, eje crucial de la economía nacional, generó ingresos por casi 5.000 millones de dólares en el último año fiscal y representa un símbolo de soberanía y desarrollo para el país.
Mulino reafirmó que «cada metro cuadrado del Canal de Panamá pertenece al pueblo panameño y así seguirá siendo», reiterando que la independencia y soberanía de Panamá no están en discusión. Mientras Trump se prepara para asumir el cargo, el episodio resalta las tensiones que podrían marcar su relación con América Latina.