Israel intercepta un misil procedente de Yemen tras los intensos bombardeos contra los Hutíes
El intercambio de ataques eleva las tensiones en Medio Oriente, mientras la ONU alerta sobre el impacto humanitario en Yemen
Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF, por sus siglas en inglés) informaron que interceptaron un misil lanzado desde Yemen en la madrugada del viernes, apenas un día después de que el ejército israelí realizara bombardeos contra infraestructuras clave en áreas controladas por los rebeldes hutíes en Yemen. Según un comunicado oficial emitido a las 03:47 hora local, el proyectil fue derribado antes de alcanzar territorio israelí.
El sistema de defensa antiaérea activó sirenas en diversas localidades del centro de Israel, alertando a la población ante la posible caída de escombros generados por la intercepción. A pesar de la exitosa neutralización del misil, las autoridades médicas del servicio Magen David Adom informaron que 18 personas resultaron heridas mientras se dirigían a los refugios antiaéreos.
El incidente también afectó temporalmente las operaciones en el aeropuerto internacional Ben Gurion, principal puerta de entrada al país. Al menos cuatro vuelos procedentes de Europa experimentaron retrasos en su aproximación debido a la situación de alerta, según medios locales.
El ataque desde Yemen ocurrió en un contexto de escalada bélica tras los bombardeos israelíes del jueves sobre infraestructuras bajo control hutí, entre ellas el aeropuerto internacional de Saná y el puerto de Al Hodeida. Según fuentes locales, estas acciones dejaron al menos seis muertos y 40 heridos. El gobierno israelí justificó los ataques como medidas preventivas contra lo que considera una creciente amenaza en la región.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reiteró su compromiso de neutralizar a los hutíes, a quienes calificó como «el brazo terrorista de Irán». En un comunicado, Netanyahu aseguró que Israel «persistirá hasta completar la tarea» de eliminar las capacidades militares de este grupo rebelde.
El secretario general de la ONU, António Guterres, condenó la nueva ronda de ataques en Yemen, describiéndola como «especialmente alarmante». Guterres destacó que estas acciones representan un grave riesgo para las operaciones humanitarias, esenciales para millones de yemeníes en situación de extrema vulnerabilidad. Yemen lleva años sumido en un conflicto devastador que ha generado una de las peores crisis humanitarias del mundo.