Pedro Sánchez ya sabe que Milei vuelve a España: el presidente de Argentina estará cuatro días

El presidente de Argentina, Javier Milei, ha incluido a España en su próxima gira por Europa, China e Israel. La visita, no oficial dada su mala relación con Pedro Sánchez, será la tercera y el motivo principal, recoger un premio el 21 de este mes de marzo.

Parece que el cruce de insultos y acusaciones entre el Ejecutivo español y Milei es cosa del pasado y no hace mella en el argentino que ha decidido pasar tres días en España. Entre el 20 y el 23 de marzo hará escala en Madrid, donde recibirá el galardón Escuela de Salamanca, antes de partir a Tel Aviv.

El «Club de los viernes», una organización «en defensa de las libertades civiles, el derecho de propiedad y el Estado Limitado», ha distinguido al presidente de Argentina con el premio Escuela de Salamanca. La entrega del mismo se hará en el Centro Riojano de Madrid. La presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, recibió el mismo reconocimiento el año pasado.

Javier Milei vuelve a España después de dar por superada la crisis bilateral de mayo del pasado año que provocó la llamada a consultas de la embajadora en Argentina, María Jesús Alonso y su posterior retirada de destino. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, escaló la crisis a extremos preocupantes con esta decisión y llegó a amagar con romper relaciones diplomáticas con Argentina. El por entonces embajador en Madrid Roberto Bosch, tuvo que soportar una bronca de Albares en unos términos impropios del cabeza de la diplomacia de España.

Sin embajador en Madrid

La respuesta del gobierno argentino fue no darse por aludido con esa decisión y dejar a su embajador en Madrid, aunque en este momento, desde que Bosch dejara España la Casa Rosada no ha designado a su sucesor.

El origen de las tensiones y agravios recíprocos comenzó durante la campaña electoral argentina. Sánchez, que apoyó la candidatura del peronista Sergio Massa, se refirió al actual jefe del Estado en términos despectivos y Oscar Puente, ministro de Transportes, le acusó de «ingerir sustancias». En otro gesto peyorativo, tras el triunfo de Milei en las elecciones, Pedro Sánchez «se olvidó» de felicitarle por su victoria y dejó al Rey sólo en Buenos Aires, sin compañía de un ministro en la ceremonia de investidura.

Estos antecedentes no pasaron inadvertidos para Javier Milei que aprovechó su visita de mayo, donde participó en la cumbre internacional de Vox, para hacerse eco del escándalo de corrupción de Begoña Gómez a la que tachó, sin nombrarla, de «corrupta» y burlarse de los días de «reflexión» de Pedro Sánchez.