La madurez de Pokémon Blanco y Negro
Como el mejor juego de Pokémon arruinó la franquicia
Pokémon es una de las franquicias más conocidas y queridas de la historia, no es por nada que tiene el título de la franquicia multimedia que más dinero ha generado en la historia con sus más de 75 mil millones de dólares recaudados. Y pensar en el gigante multimedia que es Pokémon a día de hoy solo hace parecer más lejanos aquellos días de 1996 en los que Pokémon vió la luz con sus dos primeras entregas: Pokémon Rojo y Pokémon Verde. El impacto que ha tenido este juego en nuestra sociedad no se puede dar por sentado, este juego marcó un antes y un después para toda una generación. Era un mundo totalmente nuevo, lleno de criaturas y culturas que cautivaron a todo aquel que las experimenta pero hubo un problema.
Tras 14 años y generaciones de la franquicia había gente que opinaba que la fórmula estaba empezando a volverse repetitiva, así que el director de la franquicia en ese entonces, decidió hacer una nueva entrega que hiciera tanto que los nuevos fans pudieran experimentar lo que los antiguos fans experimentaron como que los antiguos fans experimentaran algo nuevo. Con esta idea en mente, se creó la quinta generación: Pokémon Blanco y Negro, el primer juego de Pokémon que decidió salirse del molde creado por su predecesor 14 años antes.
Pokémon Blanco y Negro tomaba lugar en la región de Teselia, una nueva región compuesta por islas, naturaleza, historia y, el primer pecado de esta entrega, 150 nuevos Pokémon. El intentar recrear el sentimiento de aventura y misterio de las primeras entregas hicieron que se tomará la decisión de no poder capturar Pokémon de anteriores generaciones hasta una vez terminada la Liga Pokémon que es el final del juego, y esto no les gustó a los fans, haciendo que recibiera cientos de críticas antes incluso del estreno del juego.
Pero los Pokémon no fue lo único en lo que innovó esta entrega, ya que apostó por contar una historia mucho más madura y compleja que sus predecesores. Pokémon había tenido generaciones con buenas historias como las de Oro y Plata o Diamante y Perla, pero nunca habían contado una historia como esta. La historia de Pokémon Blanco y Negro es una que no mira por encima del hombro al jugador solo por ser un juego dirigido a un público joven, la historia habla sobre el bien y el mal y como estos son subjetivos ya que, a diferencia de lo que los títulos nos hagan pensar, en el mundo nada es ni blanco ni negro, sino que simepre hay un poco de cada uno en el otro, el Yin y el Yang. No solo esto, pero el juego se atrevió a tocar temas de la relación entre entrenadores y Pokémon y si esta consiste en amistad o en esclavitud. Todas estas ideas toman forma con el mejor antagonista de la franquicia Pokémon, N. N es un personaje interesante para la saga ya que es el único personaje de todo este mundo que piensa que los Pokémon no deberían ser utilizados para pelear sino que deberían ser tratados como con respeto y amor ya que son más que las mascotas de uno, son sus amigos, poniéndose en perfecta yuxtaposición con el jugador el cual sabe que la manera de crecer como entrenador es superando batallas con su equipo. Y de esta manera volvemos al tema que representa a este juego, el Yin y el Yang. N tiene unos ideales justos pero su objetivo final no lo es y el jugador sigue unos medios cuestionables para N pero tiene un objetivo justo.