Documentación
La decisión de la DGT que permite recuperar el carnet a miles de conductores
Se trabaja también en un fichero común de sanciones que va a permitir consultar el expediente de multas desde toda Europa
Desde el 31 de enero de 2020, miles de conductores británicos y españoles se habían quedado en un vacío legal a consecuencia del Brexit. En aquel momento finalizaban los acuerdos preferenciales que tenían los ciudadanos de aquel país en España como consecuencia de ser miembros de la UE. De la misma forma que los españoles en la isla habían perdido el derecho a disponer de carnet de conducir si no se presentaban a las pruebas británicas prácticas y teóricas y las aprobaban.
El único acuerdo vigente era un período de gracia de seis meses dentro del cual los ciudadanos británicos con carnet de conducir en su país podían circular en España de manera completamente legal.
La colonia afectada
Se calcula que esta situación afectaba a unos 360.000 ciudadanos británicos en España, que ahora pueden conducir de manera completamente legal en territorio nacional gracias al acuerdo de reciprocidad firmado entre ambos gobiernos. Este supone también que los españoles en las islas pueden ponerse al volante sin necesidad de convalidar allí nuestro carnet español de conducir.
Pero como todo no podía ser perfecto, el acuerdo afecta también a las multas y al saldo de puntos del carnet de conducir. Esto significa que los gobiernos de los dos países se han comprometido a intercambiar información tanto en lo referente a la titularidad de los vehículos matriculados en ambos países como a las sanciones relacionadas con los excesos de velocidad. De esta forma, las multas serán válidas y perseguibles en ambos territorios.
Multas comunes
El Ministerio de Interior español hace referencia también a otras sanciones que pasan a formar parte de este archivo común. En concreto, las relacionadas con alcoholemia, drogas, cinturón de seguridad, uso del casco y saltarse semáforos en rojo.
Todo esto ocurre mientras dentro de la Unión Europea se trabaja ya en un nuevo carnet de conducir digital que servirá dentro del territorio comunitario y de una nueva base de datos común de conductores para los 27 países miembros.