Seguridad vial
Nada escapa a la DGT: más de 200.000 coches pasarán por esta prueba esta semana
Las fiestas de verano son una época muy propicia para las infracciones de tráfico, por lo que la DGT ha puesto en marcha una campaña especial de control
Junto a las sanciones por excesos de velocidad, las relacionadas con el consumo de alcohol y drogas se han convertido en una verdadera obsesión para la Dirección General de Tráfico (DGT).
En este caso los datos hablan por sí mismo, y es que según un estudio realizado sobre fallecidos en carretera por el Instituto Nacional de Toxicología, el 52 % de ellos tenían rastros de alcohol y drogas en su cuerpo.
Aumentan los positivos
Se trata de un problema que lejos de reducirse, va en crecimiento, pues en 2022 la DGT registró la cifra más alta de sancionados relacionados con el consumo de drogas y alcohol al volante, con 60.000 condenados en firme.
En esta ocasión, conforme marca la Unión Europea, la DGT aboga por la tasa cero-cero en la carretera, a pesar de haber lanzado informaciones confusas esta misma primavera en las que explicaba que un conductor medio puede consumir hasta dos cañas de cerveza o dos vinos antes de dar positivo en la carretera.
Tolerancia cero
En este contexto la DGT vuelve a poner en vigor una campaña de controles de alcoholemia y drogas en carretera, que será llevada a cabo por la Guardia Civil de Tráfico en colaboración con las Policías Municipales que decidan sumarse a la misma.
La DGT destaca que entre los fallecidos en 2022 en los que se encontró presencia de drogas y alcohol en sangre un 73 % (450) mostraban una tasa de alcohol muy elevada, por encima de 1,2 gramos por litro de sangre, lo que se corresponde con una intoxicación alcohólica muy severa. Datos que lejos de mejorar se traducen en un empeoramiento de esta conducta.
En agosto del año pasado la DGT llevó a cabo una campaña similar en estas mismas fechas en las que llevaron a cabo más de 201.000 pruebas de alcoholemia, con 2.600 positivos por alcoholemia y 514 positivos por drogas.
Entre los primeros 260 fueron puestos a disposición judicial por conducir con una tasa superior a los 0,60 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.