Entrada al túnel más largo del mundo

Entrada al túnel más largo del mundo

Ingeniería civil

Así es el túnel más largo y luminoso de todo el mundo

La naturaleza salvaje de este país les ha obligado a llevar a cabo algunas de las obras de ingeniería más llamativas del mundo

La espectacular naturaleza de Noruega ha obligado a sus habitantes a construir algunas de las maravillas de la ingeniería civil más imponentes que se pueden ver en el mundo.

Entre ellas encontramos la Trollstigen, una carretera de 11 kilómetros de longitud que tiene una inclinación media de casi un 8 % y once curvas de 180 grados, lo que supone un ascenso en vertical de 838 metros.

Dignas de ver

Tampoco podemos dejar de hablar del Puente Storseisundet, el mayor de los ocho que forman el Atlanterhavsveien, que conecta Noruega con la isla de Averoya o el túnel de Lærdal, más conocido entre sus ciudadanos como el túnel de Lærdalstunnelen. Se trata de una de las mayores obras de ingeniería llevadas a cabo en el país nórdico.

En el puente de Storseisundet parece que te vas a caer al mar

En el puente de Storseisundet parece que te vas a caer al mar

Un túnel de casi 25 kilómetros de longitud que fue inaugurado en el año 2000 tras una obra que duró cinco años y casi 130 millones de euros de inversión. Este túnel está situado en la E16 entre las localidades de Oslo y Bergen y forma parte de la red de más de 1.000 túneles con las que cuenta el país.

Seguridad absoluta

En este caso y dada su longitud, dispone de innumerables medidas de seguridad, entre ellas cobertura de wifi en todo el recorrido, teléfonos de asistencia, cambios de sentido cada cuatro kilómetros y salidas peatonales con zonas de seguridad.

Dentro hay varias rotondas

Dentro hay varias rotondas

Más allá de la seguridad, durante la construcción se tuvo en cuenta el bienestar de los conductores, para lo cual un equipo de psicólogos planteó la idea de crear cuatro grandes espacios iluminados y muy amplios que transmitieran la sensación de estar cerca del exterior.

El interior cuenta con grandes espacios abiertos en los que un autobús puede dar la vuelta

El interior cuenta con grandes espacios abiertos en los que un autobús puede dar la vuelta

De esta forma, los conductores no sufrirían el estrés habitual de este tipo de construcciones. Todo ello para hacer más llevadero un trayecto que en el mejor de los casos y si no hay retenciones dura del orden de los 20 minutos.

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