El joven se tira a la calle y cruza pese a tener su semáforo cerrado al paso
Práctico
Una autoescuela denuncia la broma de los peatones kamikaze que se tiran delante de los coches en pleno examen
Si el alumno se ve obligado a repetir tasas tendrá que pagar 95 euros adicionales, a lo que hay que sumar el precio de las clases extras que tenga que dar
Tradicionalmente ha existido el rumor de que en las cercanías a las zonas de exámenes de la DGT, por ejemplo en Madrid hablaríamos de Móstoles, hay jóvenes que se divierten arruinando los exámenes prácticos de conducir a los aspirantes.
Hay que tener claro que con los nervios a los que se ven sometidos estos aspirantes a conductor durante el examen, cualquier mínimo imprevisto puede costarles un suspenso seguro.
Grabado en vídeo
Lo que nunca habíamos visto es a algunos de estos jóvenes en acción, tal y como denuncia esta autoescuela a través de redes sociales, aunque en este caso afortunadamente lo hacen durante una clase convencional y no durante un examen.
Los jóvenes charlan junto al paso de cebra antes de llegar el coche de autoescuela
Tal y como podemos ver en el vídeo, los jóvenes aguardan junto a un paso de cebra con indecisión ante la llegada del coche de autoescuela.
Pese a que los peatones tienen su semáforo cerrado en rojo y el conductor tiene el suyo en ámbar intermitente, que significa pasar con precaución, el joven se tira a la calle con total descaro.
El profesor y el alumno no dan crédito de lo que ven
Se trata de una situación que en un examen podría haberle costado un suspenso seguro al aspirante, aunque en este caso al tratarse de una clase, el profesor se limita a corregir a su alumno y a llamar la atención del joven a través de la ventanilla.
Si el joven fuera consciente de que en caso de provocar un suspenso es muy probable que el aspirante tenga que pagar 95 euros de renovación de tasas más entre 25 y 50 euros por cada clase práctica adicional que tenga que dar, es muy probable que evitaría cometer esa broma tan pesada y con tan poca gracia.
De hecho en este caso si hubiera estado la Policía Municipal podrían haber denunciado al joven con hasta 100 euros por saltarse un semáforo, una sanción aplicable también a los peatones.
