Las víctimas de ETA nunca estarán en el olvido
Memoria y relato cierto: ETA era una banda terrorista que cometió más de 800 asesinatos en plena democracia. Algo más de 300 asesinatos todavía no están esclarecidos
La sociedad española tiene contraída una enorme deuda con los servidores públicos que desde la Guardia Civil, Policía, Fuerzas Armadas, Inteligencia y Justicia han luchado años y años contra el terrorismo etarra. Fueron ellos, como representantes y defensores del Estado de derecho, y nadie más, los que de verdad derrotaron a los terroristas. Los que de verdad nos defendieron a todos los españoles; porque todos éramos objetivo de ese terror. Y cada vez que ETA se llevaba por delante la vida de una víctima, de alguna manera nos arrebataba una parte de nosotros mismos. Nada noble ni admirable había en ese conjunto de asesinos. Ayer nos lo explicó con una brillante claridad el coronel Pérez de los Cobos en el transcurso de una mesa redonda dentro del Congreso Internacional de Víctimas del Terrorismo. Resulta emocionante escuchar el sereno relato de quienes se enfrentaron al mal. Resulta, sin embargo, indignante quien, por un cálculo político, trata de blanquear a quienes solo creen en la muerte. No podemos olvidar el sufrimiento que ETA infligió al cuerpo social de nuestro país. El olvido es un territorio oscuro y frío en el que la dignidad de un pueblo no debe habitar. Memoria y relato cierto: ETA era una banda terrorista que cometió más de 800 asesinatos en plena democracia. Algo más de 300 asesinatos todavía no están esclarecidos. Aunque algunos siguen queriendo recoger las nueces del árbol negro del terror vasco, los ciudadanos de bien no podemos olvidar, y sobre nosotros pesa el mandato moral de mantener viva la historia de las víctimas.