Jueces: no es la elección, es la independencia
La democracia no solo consiste en votar, sino también en el respeto a las normas, el consenso y los comportamientos honestos que no ensucien la credibilidad de las instituciones
Lo mejor que podría ocurrir hoy tras la entrevista entre Sánchez y Feijóo es que se alcanzase un acuerdo para renovar el Consejo del Poder Judicial. Sería lo más sano para nuestra convivencia y para el buen funcionamiento de las instituciones. Sánchez tiene una nueva oportunidad de demostrar que es cierto que él es una persona proclive al diálogo con la oposición, ya que hasta ahora no ha hecho otra cosa que decir «NO» a todo lo que le propone Feijóo. En este caso, el PP ha solicitado en un documento de 18 folios algo tan sencillo como garantizar la independencia de los jueces. No entra en el sistema de elección, aunque le sugiere llevar una ley que adopte la futura formación del Consejo a las directivas europeas. No estamos hablando de cómo se eligen los jueces, estamos hablando del Estatuto Orgánico, el que tiene que garantizar la independencia de quienes imparten justicia que, como ya hemos visto, es el último dique que queda por abatir en la maltrecha vida democrática de los españoles. Sería bueno, por tanto, que de la cumbre precipitada de esta mañana saliese un consenso, tal vez el primero desde 2018. Y sería bueno también que unos y otros hiciesen pedagogía. Cuando días pasados escribimos aquí que la democracia no solo consiste en votar, sino también en el respeto a las normas, el consenso y los comportamientos honestos que no ensucien la credibilidad de las instituciones, también nos referíamos a la Justicia. España está pendiente de algunas reformas, no la de la Ley Trans, sino la Fiscal y la de Justicia. Este puede ser el primer paso.