Cartas al director
2022. Una nueva piedra de Rosetta
Este 2022 va a ser un gran año para Egipto, ya que se celebra que en 1822 Jean-François Champollion descifró los jeroglíficos egipcios gracias a la piedra de Rosetta y que en 1922 Howard Carter descubrió la tumba de Tutankamón. También abrirá el Gran Museo Egipcio.
Pero este año podría ser también el momento de dar a conocer una nueva piedra de Rosetta, porque los científicos franceses que acompañaron a Napoleón a Egipto también trajeron a Europa distintas reglas de medida egipcias, (como por ejemplo el patrón de Maya, conservado en el Museo del Louvre) y publicaron unos años después la famosa Descripción de Egipto.
En uno de sus artículos, Memoria sobre el nilómetro de la isla de Elefantina y las medidas egipcias, Pierre Simon Girard señala que la unidad central del sistema antropométrico de medidas que se empleaba en Egipto corresponde a un hombre de 1,80 metros.
Ese modelo humano se encuentra inscrito en esas reglas egipcias de siete palmas. Así pues, bien estudiadas, esas reglas son la clave fundamental para entender el sistema de medidas egipcio. En cuanto a ese modelo humano, que fue empleado a lo largo de toda la antigüedad y se transmitió históricamente (Sumer > Egipto > Fenicios > Grecia > Roma), llegó hasta Leonardo Da Vinci, quien lo recogió en un documento mundialmente famoso: el Hombre de Vitruvio.
Así, gracias a esas reglas egipcias, al Hombre de Vitruvio de Leonardo Da Vinci y al estudio de los tratados antiguos sobre medidas, se puede reconstruir totalmente el sistema de medidas antropométrico empleado en la antigüedad en arquitectura, geografía y astronomía.
¿Será 2022 el año en que se dé a conocer al mundo esta piedra de Rosetta? Esperemos que sí.