Cartas al director
El Gobierno debe estar encantado
En todos sitios se habla de la séptima ola de la covid en la que estamos inmersos.
Sin darnos cuenta, hemos blanqueado la gestión del Gobierno. La ola que ahora sufrimos es, en realidad, la octava.
La séptima ola real, la alentada por la retirada de las mascarillas y por el no aislamiento de positivos, la del abandono de los test generalizados y de no contabilizar los positivos detectados en los domicilios, ha sido silenciada.
Los expertos saben la mala calidad de los datos de España desde finales de marzo, y que la incidencia real probablemente fuera de tres a cinco veces la oficial.
El Gobierno lo consiguió. Ocultó con éxito la séptima ola para que no se le pudieran exigir responsabilidades. Ahora a la octava la llamamos la séptima.
Lo triste es que de poco ha servido la infección masiva fomentada por el Gobierno en abril y mayo, ya que la ola actual está protagonizada por variantes para las que, a la hora de evitar el contagio, de poco sirve la vacunación que tenemos y el haber pasado previamente la enfermedad.
El Gobierno ha fomentado millones de contagios para lograr una inmunidad que no se ha alcanzado. Miles de muertos y decenas de miles con secuelas…. para nada.
Pero ellos se van de rositas.
PS: la gestión del Gobierno todavía es peor, el avance de esas variantes y sus características, como su capacidad de evadir vacunas e infecciones previas, era conocido hace casi un mes. Y no cambiaron su estrategia.