El verdadero problema no son los vientres de alquiler

Este 20 de julio El Debate publicó dos noticias sobre la legislación ideológica que prepara Europa: Bruselas estudia imponer el reconocimiento de hijos por gestación subrogada a toda la Unión y La UE pretende blindar el aborto bajo una directiva para proteger a la mujer. Dos iniciativas que rechazamos, también por lo que tienen de imposición a los estados miembros, pero nos gustaría aportar un poco de perspectiva:

En Valores tenemos en tan alta consideración la dignidad de la madre y del hijo que no nos gusta la gestación subrogada. Las intenciones pueden ser buenas, pero creemos que mercantilizar los orígenes de un ser humano no es apropiado.

Los vientres de alquiler fomentan la cosificación de la mujer y de los hijos y este no es el mejor camino para defender su dignidad.

En Valores apostamos por la acogida y la adopción como medida más acorde con la dignidad humana; y más solidaria porque libra a los niños sin hogar de la falta de cariño y del abandono en el que se encuentran.

Pero dejemos las cosas claras:

Si nos preocupa la dignidad inherente de todo ser humano, sus derechos fundamentales, la lucha contra la injusticia… si de verdad esto nos preocupa, lo que tenemos que hacer es movilizarnos de una vez contra prácticas aberrantes, como el aborto, que se han impuesto con hábiles técnicas de «ingeniería social» en nuestra sociedad.

No tiene sentido vivir como si no hubiera aborto, votar como si no hubiera aborto, y escandalizarse ahora por una práctica cuestionable, como la gestación subrogada, pero a la que no se le pueden poner los calificativos que sí tiene el aborto.