Juristas opinando

Está claro, hasta para los legos en Derecho como es mi caso, que las leyes deben ser antes que nada razonables, lógicas y con sentido común ya que, si no, no hablamos de Derecho, sino de algo muy distinto.

Por ello, me resulta más fácil comprender a los juristas que explican que encajar la amnistía en nuestra Constitución es imposible, entre los cuales, por cierto, cabe incluir (por sus manifestaciones explícitas al respecto, que están en la hemeroteca) al exministro Sr. Campo, ahora miembro del TC, o al presidente del propio TC, Sr. Conde Pumpido, que a los que sostienen lo contrario, como el catedrático Pérez Royo.

He oído en la radio a Dña. Margarita Robles, ilustre jurista metida a ministra de Defensa quien, aunque no se ha pronunciado con claridad al respecto, ha divagado sobre la posibilidad de diseñar una especie de amnistía limitada en el tiempo, en el espacio y a un conjunto concreto de individuos. Entiendo (no sé si erróneamente) que, dado que no hablaba de indultos, para los cuales sus beneficiarios tienen que estar condenados y, por tanto, previamente juzgados, la ministra se debía referir a algo así como que se podrían perdonar los delitos que se hubieran cometido en octubre de 2017 (tiempo), en Cataluña (espacio) y cuyos autores hubiesen sido sediciosos concretos distintos de los que ya fueron indultados, pero eso no es amnistía, sino una broma de mal gusto (aparte de muy burda), impropia de Dña. Margarita a quien, al menos antes, no era fácil oírle decir cosas así.

Si lo que hicieron los sediciosos en octubre de 2017 no fue delito (como se desprendería de una amnistía), ¿quién delinquió entonces? ¿El Rey al pronunciar su discurso reprobando los hechos? ¿El entonces presidente Rajoy al aplicar el 155? ¿el Sr. Sánchez al apoyarlo? ¿Los Sres. Juncker y Tajani en sus respectivos discursos de agradecimiento por el premio Princesa de Asturias a la Concordia, otorgado a la Unión Europea?