Carlo Acutis, el «apóstol de Internet», ya tiene su primera vidriera

Con móvil, reloj, zapatillas, vaqueros... y la aureola propia de los santos. Así luce el beato Carlo Acutis –el adolescente italiano (aunque nacido en Londres) que murió en olor de santidad a los 15 años– en la vidriera que le han dedicado en la parroquia de San Aldhelm en Malmesbury (Inglaterra). «En nuestra iglesia había dos ventanales que carecían de imágenes, por lo que se propuso al consejo pastoral incluir una imagen del beato Carlo Acutis. Esperaba que atrajera especialmente a los jóvenes, que pudieran identificarse con él como una figura contemporánea», ha explicado al Catholic Herald el párroco, el padre Thomas Kulandaisamy.

Parece que han conseguido el objetivo: desde que el Papa Francisco aprobara la canonización del influencer de Dios, «se amplificó el interés por la historia de Carlo, atrayendo aún más visitantes al templo», prosigue Kulandaisamy. «Esta vidriera ya ha inspirado a mucha gente, tanto jóvenes como mayores», asegura el párroco.

Esto ha despertado el olfato periodístico de numerosos medios de comunicación del país, que se han desplazado hasta Malmesbury para dar cuenta del fenómeno. «Desde la publicación de un artículo en el Telegraph, San Aldhelm ha experimentado un aumento de visitantes. Muchos se sienten atraídos específicamente por la historia de la corta pero poderosa vida de Carlo, ansiosos por ver la vidriera que tan bellamente captura su espíritu», explica Kulandaisamy. Una señora de 87 años, por ejemplo, llamó a la parroquia para expresar «cuánto le había alegrado el día el artículo. Tiene una gran devoción por el beato Carlos que ha transmitido a sus 14 nietos», agrega el sacerdote.

Sanación de una niña de 6 años

El pasado mes de abril, una niña de 6 años sufrió el raro trastorno neurológico síndrome de Guillain-Barré, que dejó todo su cuerpo paralizado. Entró en coma inducido y la conectaron a un ventilador. «Durante su enfermedad, los feligreses de San Aldhelm rezaron fervientemente al beato Carlo Acutis, pidiéndole su intercesión. Ahora ha recuperado el movimiento completo en la parte superior de su cuerpo. Realmente creemos que su intercesión ha contribuido en gran medida a la rápida y notable recuperación de la niña, y tenemos la esperanza de que se recupere por completo», asegura Kulandaisamy.

«Creemos que, con el ventanal y su atractivo para los jóvenes y las familias jóvenes, San Aldhelm se convertirá en un centro de reflexión y crecimiento espiritual. Será un lugar donde los jóvenes podrán reunirse, reflexionar sobre su propia vida y considerar cómo pueden dedicarse a Dios, iniciando y avanzando en el camino de la santidad», concluye el párroco.