Fundado en 1910
Ordenación diaconal de Eliar Omar Blandón

Ordenación diaconal de Eliar Omar BlandónDiócesis de Santander

Santander

Primera ordenación diaconal desde hace tres años: de promesa del béisbol a futuro sacerdote

El pasado domingo, Eliar Omar Blandón fue ordenado diácono en Santander después de dejar el deporte por la filosofía y teología

Cuatro seminaristas, de los 18 que se forman en el Seminario Metropolitano de Oviedo, proceden de Santander. Habían pasado tres años desde que tuviera lugar la última ordenación de un diácono en Cantabria. El domingo 30 de junio el contador volvió a cero con la ordenación de Eliar Omar Blandón, que tuvo lugar en la catedral de Santander.

Su padre y su tío le inculcaron desde pequeño una afición por el béisbol, quienes llegaron a convertirse en jugadores profesionales de este deporte. Desde pequeño lo practicaba y era considerado una promesa en su Nicaragua natal, aunque pronto parecía que su camino no era aquel. Después de profundizar en los libros y de momentos de búsqueda, decidió dar respuesta a la vivencia de la fe que le transmitieron en su hogar, entregándose a Dios en el ministerio sacerdotal.

Eliar Omar Blandón, junto al obispo de Santander, Arturo Pablo Ros Murgadas, tras ser ordenado diácono

Eliar Omar Blandón, junto al obispo de Santander, Arturo Pablo Ros Murgadas, tras ser ordenado diácono

Nicaragua, Pamplona y Oviedo

Han pasado 10 años de formación desde su primer sí, los necesarios hasta que su corazón ha terminado de disponerse para recibir el diaconado. Eliar cambió Nicaragua por Pamplona, tras finalizar sus estudios filosóficos en el Seminario Nacional Ntra. Sra. De Fátima para continuar con los teológicos. Más tarde, pasaría al seminario de Oviedo.

El nuevo diácono ha estado acompañado por grupos de fieles de parroquias en las que ha estado de pastoral. Sin embargo, tuvo que sufrir la ausencia de sus padres Omar y Genara y sus familiares cercanos, quienes siguieron la celebración a través de la retransmisión de PopularTV Cantabria.

El obispo de Santander, Arturo Pablo Ros, fue quien presidió la celebración y le invitaba a descubrirse como servidor de la palabra, «fuente de su vida», y de los pobres, que son «los predilectos de Jesús y nosotros, con nuestras riquezas, no podemos estar lejos de ellos: debemos contagiarnos de esas pobrezas para saborear las delicias de la presencia del Maestro en nuestras vidas».

Del mismo modo, en su homilía, Ros ha pedido a Eliar que siempre mire desde la «perspectiva» de Cristo. «Nosotros, en nuestro ministerio sacerdotal, en el tuyo como diácono, tenemos que ver esa mirada necesaria. Jesús ve más allá, ve en profundidad, en lo hondo del corazón, los sentimientos de las personas que se acercan a Él. Deja que el Señor te mire», le reclamaba.

comentarios
tracking