Fundado en 1910
Ignacio Amorós

Ignacio AmorósWord on Fire

De la cantera del Real Madrid a misionero en África: el sacerdote que dejó la banca y ahora «busca rebeldes»

En Calcuta, estuvo dos meses trabajando en la casa de las Misioneras de la Caridad, donde pudo conocer a Madre Teresa. «Le pedí la gracia de saber ayudar a los demás, especialmente a los más pobres», recuerda

«Soy sacerdote de Jesucristo», se presenta Ignacio Amorós en su entrevista de presentación en la comunidad Word on Fire en español. Mucho antes de ordenarse, cuando era un niño, soñaba con ser jugador de fútbol y pasó unos años jugando en la cantera del Real Madrid. Los caminos del Señor son inescrutables, ya lo dice la Biblia, e Ignacio lo experimentó al abandonar el campo después de algunas lesiones y comenzar una carrera universitaria.

Su formación en empresariales le llevó hasta Londres, donde trabajó como bróker de derivados durante dos años y medio, según él mismo ha contado en el programa Hijos de Punta. Aunque Amorós se crio en un ambiente de fe, no comenzó a creer en Dios hasta los 15 años. Ese verano, un viaje a la India terminó por cambiar el rumbo de su vida.

«Me encontré con Dios y a lo que me llevó es el amor a los demás, el amor al prójimo, a la misión, al servicio», cuenta. En Calcuta, estuvo dos meses trabajando en la casa de las Misioneras de la Caridad, donde pudo conocer a Madre Teresa. «Le pedí la gracia de saber ayudar a los demás, especialmente a los más pobres», recuerda.

De vuelta de Asia, sus pasos le guiaron al verano siguiente hasta Burundi, África. En la frontera con Ruanda, pasó unos meses en un orfanato, donde junto a otros voluntarios españoles construyó una escuela. Lo que le enganchó de la Iglesia fue «la belleza de la caridad cristiana», afirma. Así, se dio cuenta de que «cuanto más amas a los demás, cuanto más te entregas, eres más feliz», añade.

Durante años trató de acallar la vocación al sacerdocio, pero en 2013 no se resistió más. Con 27 años, entró al seminario. «Después de discernirlo, de rezarlo mucho, el Señor te conquista el corazón», contó en otra entrevista con AciPrensa. Durante su etapa formativa pudo conocer de mano de varios obispos uruguayos la realidad del país hispanoamericano, la gran secularización y la falta de sacerdotes.

Su llama misionera y el celo apostólico le llevaron a cruzar el charco. En Uruguay fue finalmente ordenado sacerdote por el obispo emérito de Minas, Jaime Fuentes. Era 2018, y tan solo dos años después se unió a la diócesis de Maldonado-Punta del Este, donde ejerce también como rector del santuario de la Divina Misericordia.

Ignacio Amorós ha terminado por trasladar la misión también al mundo digital. Su proyecto Se buscan rebeldes cuenta con más de 100.000 seguidores en Instagram. El objetivo, según cuenta, es «traer la siglo XXI esa rebeldía frente a lo mundano para seguir a Jesucristo».

comentarios
tracking