Admiten la demanda de las exmonjas de Belorado al arzobispo de Burgos para reclamar su «derecho a abandonar la Iglesia»

El Juzgado de Instrucción de Briviesca (Burgos) ha admitido a trámite la demanda interpuesta el pasado 31 de julio por las exmonjas de los monasterios de Belorado y Derio contra el arzobispo Mario Iceta y la archidiócesis de Burgos. A través de dicha demanda, esperan conseguir una sentencia que declare el derecho de estos dos monasterios y sus congregaciones a separarse «por voluntad propia» de la Iglesia católica y que se validen los acuerdos adoptados por ellas para transformar las entidades religiosas en asociaciones, según ha informado el abogado de las exclarisas, Florentino Aláez.

Plantean también que se declare «ineficaz» el nombramiento realizado por el Papa Francisco del arzobispo como Comisario Pontificio y que se le condene a cesar en la «representación y administración» de los bienes de las exreligiosas. Su abogado ha indicado a través de un comunicado que confía en la «pronta conclusión» de este proceso judicial que, dejando a un lado la «disidencia religiosa», servirá para reponer a ambas comunidades «el pleno goce de sus derechos legítimos» y poder seguir dedicándose al «cultivo de la vida monástica (...) libres de interferencias exteriores ajenas a su espíritu y fieles a los dictados de sus conciencias».

El letrado ha continuado su explicación argumentando que, con ello, las que profesaron en su día en la Iglesia católica y en mayo decidieron abandonarla, estarán «libres de interferencias exteriores ajenas a su espíritu y fieles a los dictados de su conciencia». El ya apodado cisma de Belorado se produjo con la redacción y posterior publicación del «Manifiesto Católico» el pasado 13 de mayo. Desde ese día, la idea de las exmonjas ha sido «que sea la jurisdicción civil la que las acoja».

En este contexto, en junio se produjo la excomunión de las exreligiosas, por lo que quedaron «fuera del Derecho Canónico», que es la norma particular con la que se rige la Iglesia Católica. Ahora, con la admisión a trámite de la demanda de las exmonjas, el juez de Briviesca podrá agrupar en un caso tanto esta demanda como la de desahucio que ya fue admitida. El juicio que se debía haber celebrado el pasado jueves quedó suspendido porque no se pudo comunicar a algunas exmonjas, que estaban en Orduña, el auto del juez. También esta en el aire el lanzamiento que estaba previsto para el 23 de enero de 2025.