Los obispos germanos vuelven a Roma para poner orden en el rebelde camino sinodal alemán

Tercera vez que los obispos alemanes viajan a Roma para reunirse representantes de la Curia Romana por llamado del Papa Francisco. Después de los encuentros de noviembre de 2022 y de marzo de 2024, continúa ahora el diálogo sobre el comité sinodal alemán, en el que se han introducido algunos cambios.

Así, la Santa Sede ha solicitado que se le cambie el nombre al organismo, que no podrá tener más peso que la Conferencia Episcopal del país, tal y como se pretendía en sus estatutos. Estas son las conclusiones de unas conversaciones que han durado «todo el día», en las que se ha mantenido un «ambiente positivo, abierto y constructivo», según ha indicado el Vaticano.

En el encuentro, los obispos han informado acerca de la última reunión de este comité del Sínodo en la que se debatieron los fundamentos teológicos y la posibilidad jurídica de instituir un órgano sinodal nacional, a cuya formación se había negado el Vaticano por socavar la autoridad de los obispos.

En un comunicado conjunto emitido por el Vaticano y los prelados germanos, indican que siguen estudiando otras maneras de ejercitar «la Sinodalidad en la Iglesia en Alemania, de acuerdo con la eclesiología del Concilio Vaticano II, el Derecho Canónico y los frutos del Sínodo de la Iglesia Universal». Según explican, sus decisiones serán sometidas al reconocimiento de la Santa Sede.

Según especifican, «una comisión creada por el Comité sinodal se ocupará de la sinodalidad y de la estructura del órgano sinodal». Esta va a trabajar en contacto directo con una comisión similar formada con representantes de los Dicasterios vaticanos competentes. El deseo desde Roma es que se modifique el nombre y «varios aspectos de la propuesta anterior sobre un posible órgano sinodal» a nivel nacional. A lo que añaden: «hubo acuerdo en que no esté ni por encima ni al mismo nivel que la Conferencia Episcopal».