La versión sintética de las setas alucinógenas, clave en el tratamiento de la depresión severa
Los pacientes consiguen mejoras con una única dosis de psilocibina
Los hongos 'mágicos' en el tratamiento de personas con depresión no es algo nuevo. De hecho, las también conocidas como setas alucinógenas, son legales en algunos estados de EE.UU. como Oregón para su uso terapéutico. Sin embargo un estudio publicado en The New England Journal of Medicine (NEJM), asegura que una dosis única de una versión sintética del componente de los hongos mágicos, la psilocibina, mejoró la depresión en personas con una forma de la enfermedad resistente al tratamiento.
El objetivo del estudio de fase 2b, aleatorizado, controlado y doble ciego fue comprender la eficacia y la seguridad de una dosis única de psilocibina COMP360 en investigación (25 mg o 10 mg), en comparación con 1 mg, en pacientes con depresión severa. Los investigadores comprobaron que después de una dosis única de 25 mg de psilocibina COMP360, en combinación con apoyo psicológico, el 29,1 % de los participantes con depresión severa estaban en remisión en la semana.
«La publicación de nuestro estudio de terapia con psilocibina en la revista médica revisada por pares más prestigiosa del mundo es un momento de orgullo para todos los involucrados», dijo el Dr. Guy Goodwin, director médico de COMPASS Pathways. «Vimos resultados positivos en un grupo de pacientes particularmente difícil de tratar, y la dosis más alta de psilocibina tuvo el mayor impacto en la depresión de las personas. Esto sugiere que la psilocibina tiene un verdadero efecto farmacológico, un hallazgo que es fundamental para que se reconozca como una nueva opción de tratamiento en el futuro. Esperamos comenzar nuestro programa de fase 3 a finales de este año, acercándonos a proporcionar el tratamiento con apoyo psicológico para los pacientes que lo necesitan desesperadamente», asegura el doctor Goodwin.
El ensayo clínico se llevó a cabo en 22 enclaves de Estados Unidos, Canadá, el Reino Unido y siete países de Europa. El estudio fue diseñado para probar la seguridad de diferentes dosis de la versión patentada de psilocibina.
Los 233 participantes del estudio tenían depresión resistente al tratamiento, que solo se puede diagnosticar después de que una persona no responda a dos ciclos de antidepresivos.