Ocho consejos para sobrellevar la melancolía en Año Nuevo

La Navidad es la festividad en la que los cristianos conmemoran el nacimiento de Jesucristo. Días en los que la familia se reúne en torno a la mesa y comparte, no solo comida y regalos, sino anécdotas, vivencias, alegrías y tristezas. La psicóloga sanitaria Anushik Harutyunyan, de Onelife, ofrece una serie de consejos para que estas reuniones sean un momento de celebración para todos.

• Ser sincero con uno mismo: En primer lugar la psicóloga recomienda «ser sincero con uno mismo y priorizar aquellas actividades o reuniones que resulten agradables, en detrimento de otras que resulten especialmente difíciles».
• Buscar una actividad alternativa: En caso de no preferir participar en las fiestas y reuniones, se aconseja comunicarlo a las personas con las que se iba a producir la reunión, así como buscar una actividad alternativa que resulte placentera y con la que se disfrute.
• Respetar y acompañar: De igual forma, la psicóloga insiste en la importancia de no ofenderse si algún ser querido prefiere no participar en las reuniones marcadas. «Respétalo y acompáñalo», apunta.
• Dar un lugar a los seres queridos que ya no están: En cuanto a los seres queridos que ya no están, la experta aboga por «saber darles su lugar». «Podemos aprovechar la reunión para recordar los buenos momentos con la persona, contar anécdotas o brindar por ellos. Es inútil intentar ignorar esa silla vacía, ya que todos los asistentes son conscientes de lo que está ocurriendo.
• Hablar de las pérdidas y ausencias ayudará a aquellas personas que están sufriendo más por este hecho expresen sus sentimientos y se sientan acompañados», apunta la psicóloga.
• No es una competición económica: Apuesta por que los regalos «no sean caros y abundantes». «Lo importante de las fiestas es estar con las personas que queremos y nos quieren, no se trata de una competición económica», afirma.
• Cuidar la dieta: En cuanto a las comidas, comenta que, si normalmente se cuida la dieta, no es necesario dejarla de lado.
• No abandonar las actividades habituales y, sobre todo, aquellas cosas con las que disfrutamos. Por ejemplo, «si te gusta ir al gimnasio por las tardes, no dejes de hacerlo por el hecho de que estemos de fiesta».