La culpa de la depresión por el estrés está en un grupo de neuronas

No hay que confundir una depresión postvacacional con el malestar de volver a la rutinaGTRES

Depresión postvacacional: Cinco consejos para hacer más fácil la vuelta a la rutina

No hay que confundir una depresión postvacacional con el malestar de volver a la rutina, según los expertos

Enfrentarse al mes de septiembre no siempre es fácil. En estas fechas de inicio de curso, quien más o quien menos, debe afrontar la readaptación a las tareas laborales o académicas tras las vacaciones algo que puede acarrear situaciones de ansiedad, un síndrome conocido como depresión postvacacional.

Después de pasar unos días de relax al borde del mar, acompañados de familia o amigos, o visitando lugares increíbles, volver a los madrugones, las 8 horas en el trabajo y la rutina de la casa se puede hacer muy cuesta arriba. Pero, ¿en qué consiste la depresión postvacacional y cómo se puede aliviar?

«Empezar el curso y volver al trabajo es uno de los temas que vemos en consulta, a la gente le cuesta volver a trabajar. Esto puede ser el proceso normal después de las vacaciones o pueden esconder otro tipo de dificultades, como que su trabajo no les satisface, sienten que no avanzan, lo ven solo como una forma de ganar dinero y no como un medio de desarrollo personal, o tienen dificultades con alguna persona del entorno. Por otro lado, las personas que tienen la suerte de dedicarse a algo que les gusta, les cuesta menos reincorporarse después de las vacaciones», señala Ana Lucas, psicóloga y directora de Psico-Salud.

A veces, esa sensación de «depresión» después de las vacaciones puede producirse también después de pasar unas vacaciones increíbles, que han superado con creces las expectativas, o en las que se ha logrado salir de la rutina y disfrutado de muchos momentos de vida social. Volver a nuestra rutina y asumir que ya no es todo tan emocionante, o que no tenemos tanto tiempo para quedar con nuestros amigos o conocer gente nueva, puede hacer que la vuelta se nos haga cuesta arriba.

¿Cómo podemos darle la vuelta a la depresión postvacacional? Ana Lucas nos comparte cinco recomendaciones para hacer más fácil nuestra vuelta a la rutina:

Cambia el enfoque

Volver al trabajo no puede ser volver a la «batalla». Si hay algo que no funciona en nuestro trabajo tenemos que identificar qué es. Puede que necesites buscar una nueva motivación, que necesites un nuevo enfoque o que tengas que resolver alguna dificultad asociada al trabajo.

Vacaciones diarias

Introducir el concepto de vacaciones diarias en nuestro día a día nos ayuda a dedicarnos un tiempo en especial, donde a veces no es necesario hacer nada especial, simplemente disfrutar de las cosas que te gustan y te motivan.

Planifica vacaciones cortas

Ponte en marcha desde ahora y organiza pequeñas escapadas y fines de semana largos para desconectar, a lo largo del curso. Cambiar de escenario o tomar el aire ayuda a recuperar energía.

Estilo «disfrutón» de vida

No todo tiene que ser trabajar. Antes había una cultura del esfuerzo más estricta, con un calendario muy establecido y centrado en el trabajo. Las nuevas generaciones nos están enseñando un nuevo estilo de vida en el que el trabajo es un medio y no un fin, y es posible combinarlo y disfrutar también del ocio.

Teletrabajo

Si tu trabajo te permite trabajar desde casa, aprovéchalo para hacer escapadas y estar más en contacto con la naturaleza, visitar otros lugares o disfrutar del hogar al mismo tiempo que te vas adaptando a la rutina.

Volver a la rutina

Para la psicóloga Ana Lucas, no hay que confundir una depresión postvacacional con el malestar que nos produce tener que volver a la rutina. Y es que, al hablar de depresión postvacacional tenemos que estar muy atentos a los primeros síntomas. «El primer síntoma más fácil de identificar suele ser que baja el nivel de energía, eso se aplica a todos los aspectos de la vida. Desde salir, ponerse guapo, a hacer la comida o que cueste hacer planes. Eres más lento con las ideas, y no te apetece hacer las cosas. Y el segundo síntoma es que aparecen ideas rumiativas de malestar que ocupan espacio mental y todas están relacionadas con ese tema».

En el momento en el que se manifiestan alguna de estas señales, la apatía y la falta de energía, es muy importante apoyarte en un profesional que te ayude a identificar el problema y te asesore para empezar el curso con buen pie.

comentarios
tracking