¿Cuál es la mejor posición para dormir?
Boca abajo, boca arriba o de costado; estas son las ventajas e inconvenientes de cada una de ellas
Dormir bien es fundamental para que el cuerpo se recargue levantándonos alerta y con fuerzas renovadas. El sueño potencia la mente, restaura el cuerpo y fortalece prácticamente todos los sistemas del cuerpo. La mayoría de los adultos requieren entre siete y nueve horas de sueño nocturno mientras que los niños mayores de cinco años necesitan entre ocho y doce horas. Sin embargo, no por irse a la cama el cuerpo descansa correctamente. Hábitos de vida positivos y una dieta saludable ayuda a asegurar una cantidad adecuada de sueño, pero hay otro factor a tener en cuenta, como la posición en la que se duerme.
Según los expertos, los adultos cambian de postura al dormir de tres a 36 veces. En este comportamiento influye el nivel de cansancio, que las condiciones de luz y ruido sean estimulantes durante el sueño, la temperatura de la habitación, la ergonomía del colchón y las almohadas.
Expertos del Instituto del Sueño explican que lo importante a la hora de elegir la posición predilecta para dormir es cuidar que ésta no comprima excesivamente las articulaciones, ni los músculos queden en una posición anormalmente acortada o estirada.
Boca abajo, boca arriba o de costado, estas son las ventajas e inconvenientes de cada una de ellas según los especialistas en sueño:
1. Boca arriba:
Es la forma de acostarnos más idónea para equilibrar el peso del cuerpo, ayuda a mantener los órganos internos alineados, previene el dolor de cuello y de espalda siempre y cuando no uses almohadas muy altas. Se sugiere colocar una almohada debajo de las rodillas para ayudar a mantener la alineación correcta de la espalda y así evitar dolores lumbares.
Desventajas: Parte de las desventajas de dormir boca arriba es que las personas tienden a sufrir de reflujo ácido, porque la cabeza no está elevada en relación al estómago haciendo que los contenidos gástricos puedan burbujear hasta el esófago o por la garganta. En estos casos una solución es levantar la cabeza con almohadas o levantar la parte del cabecero de la cama entre 5 y 10 centímetros.
2. Posición fetal:
Numerosos estudios sobre el sueño coinciden en que dormir del lado izquierdo es la posición más saludable para la alineación y descanso del cuerpo.
A esta postura se le atribuye el alivio de problemas como el reflujo gástrico, los ronquidos (apnea obstructiva del sueño) o la dificultad respiratoria.
Además, estudios recientes han demostrado que favorece al drenaje glinfático que se encarga de la limpieza de residuos del sistema nervioso central.
Esta es perfecta para personas que padecen dolores lumbares ya que es una posición neutral para la columna vertebral. Evita que el peso recaiga sobre esta zona, se disminuyen las posibilidades de presentar alguna dificultad respiratoria. Mejora si colocas una almohada ergonómica entre las rodillas.
Desventajas: Parte de las desventajas de esta posición radica en que produce presión sobre las extremidades lo que puede llegar a provocar estrés en músculos y nervios al tiempo de una mala circulación sanguínea en la zona de apoyo, por lo que se sugiere colocar una almohada o cojín entre las rodillas.
3. Boca abajo:
De las tres posiciones, boca abajo es la menos recomendada, especialmente para los bebés, debido a que con esta postura corporal la columna se fuerza a una posición contraria a su forma natural y también se ven afectados el cuello y la cervical.
Desventajas: Al dormir boca abajo obligamos al cuerpo a mantener una postura forzada durante varias horas seguidas. De esta forma se ejerce una excesiva presión sobre todo el cuerpo, especialmente en la zona cervical que involucra músculos, tendones, nervios y huesos. El estrés al que es sometida la columna vertebral puede llegar a provocar problemas como tendinitis, lumbalgias o cervicalgia.