Los alimentos indispensables en la cena del gurú de la longevidad, el Dr. Sinclair
El biólogo molecular de la Facultad de Medicina de Harvard, el Dr. David Sinclair, lleva años estudiando como revertir el envejecimiento, un proceso que aborda como si de una enfermedad se tratara y, por tanto, como algo que se puede tratar e incluso curar. Considerado uno de los gurús del envejecimiento, asegura que practicar tres hábitos diarios le han permitido revertir su edad biológica en una década. Ayuno intermitente, dieta vegetariana/vegana (que completa con suplementos) y ejercicio físico.
El profesor de Harvard asegura que aunque a los veinte años los jóvenes piensen que son inmunes al envejecimiento y a las enfermedades, ahora sabemos que el reloj epigenético empieza a correr desde el nacimiento y que lo que hacemos a los veinte años afecta a nuestra longevidad final.
En una entrevista en Inside Tracker, el gurú de la longevidad explica: «He estado trabajando toda mi carrera tratando de entender por qué envejecemos y cómo poder ralentizarlo, si no revertirlo. En los últimos 20 años hemos descubierto que tenemos mecanismos de reparación incorporados que normalmente hacen un trabajo muy bueno para mantenernos jóvenes. Pero pueden cobrar vida y activarse para mantenernos más jóvenes y saludables por más tiempo. Nuestros cuerpos son bastante complacientes y empeora si somos sedentarios y no comemos los alimentos adecuados en las cantidades adecuadas», afirma.
Ayuno intermitente
Sobre el ayuno intermitente, Sinclair explica en un artículo Routines que es partidario de estar de 16 a 18 horas sin ingerir una comida copiosa: «Creo que tres comidas al día más tentempiés es demasiado. Pone al cuerpo en un estado de abundancia, que desactiva nuestros genes de longevidad. Por eso, conviene tener un período de ayuno cada día a partir de los 20 años. El que yo intento mantener es de 16 a 18 horas» aunque asegura que «cada individuo tiene un estilo de vida diferente, una tolerancia al dolor y al hambre, y un microbioma diferente. Esto es algo importante que hay que tener en cuenta».
Desayuno
El doctor David Sinclair comienza su día con agua caliente y limón, una opción refrescante e hidratante, seguida de una o dos tazas de té verde matcha, bebida cargada de polifenoles saludables como las catequinas ECGC, que previenen el cáncer, asegura. Además, consume resveratrol en forma de suplemento todas las mañanas junto con un yogur casero.
Almuerzo ligero
A la hora del almuerzo, el profesor apenas ingiere calorías que provienen de una ensalada pequeña, «la mayoría de las veces trato de no comer mucho hasta la cena».
Para recargar energías Sinclair se permite picar entre horas chocolate negro al 80 % o nueces de Brasil en pequeñas cantidades.
Cena
A la hora de la cena, el Dr. David Sinclair asegura compartir ese momento en familia –con su esposa y sus tres hijos–, y a pesar de no comer durante todo el día, su cena es relativamente pequeña. Elige una dieta basada en plantas para sus comidas ligeras y saludables, con un consumo mínimo de azúcar y alimentos ricos en almidón.
«Esa cena sería a base de plantas y frutos secos, con arroz, almendras, cuscús o mandioca triturada» y añade: «Casi nunca como algo que no sean alimentos de origen vegetal o frutos secos. No consumo productos lácteos ni alcohol. Muy pocas veces como o bebo algo de eso, pero de vez en cuando, para una celebración o lo que sea, me alegro de hacerlo, pero es en eso en lo que me concentro. Eso ha marcado una gran diferencia en mis biomarcadores sanguíneos y en mi edad epigenética. En tan solo unos meses, pude reducir aún más mi edad biológica comiendo mejor».
Ejercicio diario
El biólogo molecular sugiere un mínimo de 30 minutos de ejercicio moderado diario. El incluye 100 flexiones diarias, además de salir a caminar dos veces por semana y realizar carreras breves en cinta durante unos veinte minutos. Para contrarrestar el sedentarismo prolongado, afirma hacer todo lo posible por no sentarme durante todo el día.
El sueño, asignatura pendiente
A la hora de dormir, el profesor de Harvard afirma en el artículo de Routines, afirma: «Intento dormir al menos seis horas por noche y, a veces, lo logro, pero diría que es algo en lo que tengo que trabajar. Preferiría dormir siete u ocho horas, pero puedo arreglármelas con seis».