Los errores de Simón desde que comenzó la pandemia
El coronavirus ha desmontado la credibilidad que el virólogo podría tener ante los medios. Ahora sus previsiones se han convertido en carne de parodia
Fue a comienzos de 2020 cuando el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, empezó a ser una de las imágenes públicas más comentadas en España. Aunque traía cierto prestigio acumulado de sus apariciones con el caso de Ébola que hubo en España en 2014, sus predicciones ahora son carne de parodia para buena parte de la población.
Uno de los gazapos más conocidos, y que empezó a hacerle tristemente conocido, lo cometió el 31 de enero de 2020. Ese día, compartiendo opinión con algunos científicos, aseguró que «España no va a tener, como mucho, más allá de algún caso diagnosticado». Unos meses después, el país entero estaba confinado.
«Me sorprende el exceso de preocupación. La gente no se agobia con la gripe porque es algo a lo que estamos acostumbrados». Palabras de Simón el 16 de febrero de 2020, cuando el virus había entrado a nuestro país pero aún era visto por más de uno como un problema ajeno.
El 8 de marzo, una semana antes de que el Gobierno decretase el estado de alarma, Simón compareció ante la prensa: «No tenemos una situación en la que a nivel país se pueda pensar en una trasmisión generalizada y descontrolada ni muchísimo menos», dijo entonces.
Nueve días después, con el país confinado por tercer día consecutivo, volvió a aparecer en las pantallas de todos los hogares españoles y afirmó que la situación se «ralentizaba un poquito». El 22 aseguró que se observaba una «estabilización de nuevos casos».
«No veo transmisión descontrolada»
Desde ese momento, las gráficas de contagios e ingresos en los hospitales no pararon de subir, de forma simultánea a la de muertes. El doctor sin MIR dejó de salir ante las cámaras. No volvió a hacer declaraciones polémicas durante toda la primera oleada del COVID-19.
Dos meses después del ataque de tos que volvió a hacerle viral en las redes por culpa de una almendra, siguió con sus predicciones. La primera fue el 27 de julio, cuando los contagios por el verano empezaban a subir. Entonces dijo: «No creo que tengamos transmisión descontrolada, ni muchísimo menos».
15 de octubre, cuando el pico de la segunda ola no paraba de crecer, llevando a los sanitarios a niveles extremos, el epidemiólogo tuvo una nueva suposición: «Da la sensación de que podríamos estar en la fase de estabilización previa a un posible descenso». «Los datos a mí me empiezan a preocupar», estas fueron las palabras de Simón en octubre, él veía que los contagios subían. Pero la realidad es que pronóstico de Simón también falló, en vez de descontrolarse la situación, el número de contagios descendió aproximadamente un mes.
Son innumerables las meteduras de pata del director del CCAES, pero parece no tener pudor a lo que dice. En junio del 2021 advirtió que la variante Delta iba a tener un «efecto testimonial» en nuestro país y no debíamos tener una preocupación excesiva. Delta suspuso un número muy elevado de los contagios registrados en España.
¿Se acerca el final de la pandemia?
Está claro es que la futurología no es lo suyo. La última especulación, por el momento, fue en la Universidad de León, donde asistió a un congreso de la Sociedad Española de Epidemiologia. El responsable del CCAES señalaba la luz al final del túnel y ha garantizado que el país no tendría olas epidémicas tan grandes como las de ahora. «Es probable que no tengamos grandes olas epidémicas. Podemos tener alguna ondulación, en grupos concretos, y que no lleguen a ser grandes brotes». Se verá en los próximos meses.